Informe revela niveles alarmantes de contaminación fecal en playas de Nueva York

Se analizaron cerca de 350 playas en Nueva York para detectar bacterias fecales,

Los aumentos de bacterias pueden provenir de fuentes como el desbordamiento de aguas residuales. (Fuente externa)

Una forma popular de combatir el calor durante el verano es refrescarse en diversas costas, desde lagos hasta océanos. Sin embargo, un nuevo informe sorprendente podría hacer que las personas piensen dos veces antes de zambullirse.

Según un informe de Environment America, aproximadamente la mitad de las playas de Nueva York resultaron potencialmente inseguras el año pasado debido a los niveles de contaminación fecal. Al menos un día excedió el "Valor de acción de la playa" establecido por la Agencia de Protección Ambiental, una herramienta preventiva para medir bacterias.

Según los datos recopilados, uno de cada nueve frentes costeros tenía heces peligrosas en al menos el 25 % de los días en que se realizaron las pruebas. La Costa del Golfo fue la más contaminada, con más del 80 % de las costas afectadas, mientras que la Costa Oeste y los Grandes Lagos quedaron rezagados.

Aunque los resultados varían según el estado, Nueva York ocupa el primer lugar como el lugar más peligroso entre los vecinos de los tres estados, seguido de Nueva Jersey y Connecticut.

Se analizaron cerca de 350 playas en Nueva York para detectar bacterias fecales, y más de la mitad no cumplían con los estándares de seguridad, tanto en los Grandes Lagos como en Long Island. Las principales playas cuestionables fueron Ontario Beach en el condado de Monroe y Tanner Beach en el condado de Suffolk.

El condado de Atlantic en Nueva Jersey y el condado de Fairfield en Connecticut tuvieron los días potencialmente más alarmantes el año pasado.

El aumento de bacterias puede provenir de fuentes como el desbordamiento de aguas residuales, aguas pluviales contaminadas e infraestructura en descomposición que permite que el lodo sin tratar ingrese a las vías fluviales.

Según un estudio de Environmental Health, se producen alrededor de 90 millones de casos de enfermedades relacionadas con la recreación acuática en todo el país, con costos de hasta $3,700 millones anuales. Casi el 60% de estas enfermedades se atribuyen a la natación, pero muchas dolencias similares no se denuncian.

Los problemas gastrointestinales, nasales y respiratorios son comunes cuando se juega en lagos, océanos, ríos y estanques problemáticos.

Según Environment America, algunas de las mejores formas de mejorar la calidad del agua en las playas incluyen invertir en infraestructura natural, modernizar los sistemas de alcantarillado y promulgar moratorias en las operaciones ganaderas a gran escala.