El Niño Josele, una sinergia entre hombre, guitarra y arte

El gran guitarrista flamenco Juan José “Niño Josele” Heredia ofreció ayer un espectáculo musical en el Palacio de Bellas Artes, su primera vez en el país, donde, con su “Guitarra Universal”, homenajeó a los grandes maestros Paco de Lucía y Chick Corea con su particular arte y autenticidad. 

Como gran guitarrista que es, lleva el flamenco en la sangre y, como no podía ser de otra manera, hipnotizó al público de Santo Domingo.

Todos los asistentes, atónitos y perplejos, confirmaron cómo lo que dijo la gran bailaora Eva Yerbabuena hizo justicia en el escenario: “la madre del flamenco es el cante, aunque la labor más difícil la tiene el guitarrista, que hace sentirse satisfechos al bailaor y al cantaor”, y el Niño Josele, lo hizo parecer sencillo. 

Con una nobleza y excelencia inigualable en sus manos, el guitarrista español conquistó a todos los asistentes con piezas como ‘Soleá’ o ‘Taranta’. Él, situado en el centro del escenario, pareciera capaz de parar el tiempo con cada rasgueo, lento, suave o rápido; incluso despertaba sonrisas de orgullo y maravilla en los otros músicos.

El acompañamiento

En el escenario estuvo acompañado de Dany Noel en el bajo, Sergio Fargas en la batería, el bailaor Niño de los Reyes y su hijo, José Heredia, en el piano. Interpretaron grandes temas como ‘Galaxias’, entre otros.

Esta pieza de más de nueve minutos mezcló el flamenco de una rumba y los ritmos latinos con el jazz de Chick Corea; dos universos que suenan al unísono y fusionan sus características más puras. 

El espectáculo fue organizado por la Embajada de España en RD, con el apoyo logístico de la Fundación Sinfonía y el patrocinio de Iberia. El Palacio de Bellas Artes se presentó casi lleno a falta de alguna butaca solitaria. 

• Como no podía ser de otra forma, y puesto que el concierto fue en su homenaje, el Niño Josele y sus acompañantes finalizaron ofreciendo un bis con la canción ‘Entre dos aguas’ de Paco de Lucía, un gesto que el público que permaneció en la sala disfrutó y bailó.