Piedras en el camino

Los cinco errores ortográficos más comunes en español y cómo evitarlos

Lista de los errores ortográficos más comunes para mejorar tu ortografía. (Shutterstock)

Cada día gustan más las listas. Basta con navegar en la red para encontrar un sinfín de ellas. Organizar el mundo, siempre tan complejo, en pequeñas porciones nos ayuda a entenderlo, aunque corramos el peligro de simplificarlo demasiado.

Hoy sucumbimos a la tentación y proponemos repasar los cinco errores ortográficos más frecuentes entre los que escribimos español. No son todos, ni mucho menos, pero superarlos mejora nuestros textos.

Para confeccionar esta lista personal me he dado una vuelta por los portales de correctores y centros de enseñanza y, ¿cómo no?, le he preguntado a la inteligencia artificial.

Imprescindible: a los datos recopilados les he aplicado la inteligencia natural, la poca o mucha de la que dispongo. Por cierto, tengo que reconocer que la inteligencia artificial no estuvo muy fina; confundió ortografía con gramática, conjugación verbal con concordancia, y algunas que otras sorprendentes «cosillas».

El resultado conjuga dificultades ortográficas que todos reconocemos: palabras homónimas o parecidas, tildes, mayúsculas y pares de letras que representan el mismo sonido. Si vamos superando poco a poco estos errores, nuestros escritos ganarán en claridad y calidad.

  • Hay unanimidad en que el escollo ortográfico más frecuente es la distinción entre haber y a ver. Pero las dificultades con el omnipresente haber no se quedan ahí; están en la colada de muchas otras confusiones; vean, si no, las combinaciones hay (frente a ay y ahí), haya (frente a halla, allá, aya); ha (frente a la preposición a). Gracias a ellas la ortografía de haber se ha ganado el primer puesto de la lista. 
  • A pesar de la simplificación que trajo la Ortografía de la lengua española de 2010 para el sistema de las tildes diacríticas, tanto en monosílabos como en demostrativos, seguimos teniendo muchas dificultades en su manejo y aparecen una y otra vez mal escritos. A las tildes diacríticas les toca el segundo puesto.
  • La colocación o no de la tilde está también detrás de los errores tan frecuentes en la escritura de los pronombres y adverbios interrogativos: que/qué, donde/dónde, y el resto de sus colegas, ocupan el tercer puesto.
  • Desde luego, el cuarto puesto de la lista se lo gana la ortografía de porque, por que, por qué y porqué. No debemos restarles importancia. Su alta frecuencia de aparición hace que se multipliquen nuestras dudas.
  • Si de mayúsculas se trata, algunos contextos como los días de la semana, los meses del año o los cargos y títulos se nos atragantan, ortográficamente hablando, más de una vez. Colocados quedan en el quinto puesto, en el cierre de esta lista singular.

Fuera de nuestra lista han quedado las letras y los signos de puntuación. Si atendemos a su importancia y a su número merecerían formar una lista propia. Ya llegará. De momento, la que hemos conformado hoy nos sirve para ser conscientes de las pequeñas piedras que nos vamos a encontrar en el camino ortográfico. Con ella podemos analizar con cuál de estas piedras nos tropezamos alguna que otra vez y por qué.

Solo nos faltaría el paso más importante: pasar a la acción y aprender cómo esquivar la piedra para evitar el tropezón. Desde esta Eñe nos comprometemos a repasarlas con lupa una a una para aliviarles el camino.

María José Rincón González, filóloga y lexicógrafa. Apasionada de las palabras, también desde la letra Zeta de la Academia Dominicana de la Lengua.

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