Hilary Swank, maternidad, edad dorada y… ¿regreso a Karate Kid?

El nombre de Hilary Swank no le es desconocido a casi nadie, especialmente si gustan del cine. Pero lo que no muchos saben es que la actriz, que sopla 50 velas en su tarta, tuvo unos comienzos muy difíciles y logró su sueño gracias al apoyo materno, la disciplina deportiva y un enorme talento.

Deporte y actuación unidos

Hilary Ann Swank nació en Lincoln, Nebraska (Estados Unidos) el 30 de julio de 1974. Hija de Judy Kay y Stephen Michael Swank, tiene ascendencia mexicana e inglesa, y su apellido es de origen alemán. Creció en un entorno humilde y pobre.

Deportista desde muy pequeña, compitió en las Olimpiadas Infantiles como nadadora y fue una de las cinco mejores atletas juveniles de Nebraska. Sin embargo, un productor la descubrió a edad temprana y tuvo también un inició precoz en el mundo de la actuación.

De hecho, a los 16 años, tras la separación de sus padres, Hilary se mudó con su madre a Los Ángeles para perseguir su sueño de ser actriz. Tuvieron que vivir en un coche debido a los problemas económicos que pasaron hasta poder mudarse a un apartamento.

“Mi madre siempre creyó en mí”, aseguró Swank a Times Leader, que abandonó los estudios en el South Pasadena High School de California porque “sentía que no encajaba, no pertenecía a ningún lugar”.

Su primera oportunidad le llegó con un papel secundario en la película de ‘Buffy the Vampire Slayer’ (1992). Después le vino su primer papel protagonista en el cine, ‘The Next Karate Kid’ (1994), algo a lo que agradeció su buena forma física por su afinidad con el deporte.

Actriz con doble Óscar

A partir de ahí tuvo más papeles en filmes poco relevantes y también trabajó en la película de televisión ‘Quiet Days in Hollywood’ (1997) junto al que sería su primer marido, Chad Lowe. Se casaron en 1997 y se divorciaron 10 años después, en 2007. 

Pero el papel que la catapultó a la gloria vino con ‘Boys Don't Cry’ en 1999. Hilary daba vida a un joven transgénero, y su interpretación le valió su primer Óscar a Mejor Actriz.

Sin embargo, a pesar de este gran reconocimiento, los papeles que le ofrecieron a posteriori no eran gran cosa y estuvo cerca de retirarse.

Pero en 2004 volvió su oportunidad de brillar con ‘Million Dollar Baby’, de Clint Eastwood. Un papel que le valió su segundo Óscar, uniéndose a actrices míticas como Vivien Leigh, Sally Field y Luise Rainer en tener el logro de conseguir dos veces la estatuilla dorada con solo dos nominaciones.

Desde ese momento, su filmografía creció extensamente: ‘The Black Dahlia’ (2006), ‘P.S. I Love You’ (2007), ‘Amelia’ (2009), ‘New Year’s Eve’ (2011), ‘The Homesman’ (2014), ‘Logan Lucky’ (2017), ‘What They Had’ (2018), ‘I Am Mother’ (2019), ‘The Hunt’ (2020) o ‘The Good Mother’ (2023), son algunos de sus trabajos.

Su filme más reciente, ‘Ordinary Angels’ (2024), trata entre otras cosas sobre los donantes de órganos, que, para la actriz, “son poderosos y salvan vidas”, dijo a Excélsior.

Y es que ella vivió la experiencia muy de cerca: “gracias a un donante que ayudó a mi papá, él pudo vivir un poco más de lo que hubiera vivido de no recibir el trasplante”. 

Muchas aventuras por vivir

Y es que entre 2014 y 2017, la actriz se tomó una importante pausa en su carrera para cuidar de su padre enfermo.

“Quería estar junto a él tanto como él me necesitase”, dijo a The Independent y afirmó que para ella había sido “un honor y una bendición” haber compartido ese tiempo con Stephen Swank, que falleció en 2021.

En cuanto al resto de su vida personal, tras divorciarse de Chad Lowe, Hilary Swank estuvo saliendo con John Campisi, su agente, aunque rompieron el compromiso en 2012. En 2015 comenzó una relación con el tenista colombiano Rubén Torres, pero se comprometieron y rompieron en 2016. 

Ya en 2018 volvió a darse el “sí, quiero”, esta vez con el empresario Philip Schneider, con quien llevaba dos años de noviazgo.

En 2022 anunció que estaba esperando: “no ha sido fácil, pero ha merecido la pena” escribía en su Instagram en abril de 2023, tras dar a luz a un niño y una niña en un embarazo que, por su edad, la actriz consideraba “un milagro”.

Y ha sido en San Valentí de este año que la actriz ha desvelado los nombres de sus hijos, Aya y Ohm. Ese mismo mes acalló los rumores sobre su posible regreso a ‘Karate Kid’ en la franquicia Cobra Kai: “desgraciadamente no lo creo”, dijo a Collider. 

Sin embargo, el actor protagonista, Ralph Macchio, dejó abierto el regresó de Swank a la exitosa producción de Netflix. O, como mínimo, fue ambiguo: en una entrevista con ET Online: “¿quién no lo querría?”, dijo al respecto.

Por su parte, tras el estreno de ‘Ordinary Angels’, Hilary Swank quiere celebrar su cumpleaños continuando con su carrera: “aún hay mucho que quiero lograr, muchas historias que quiero contar”, dijo a Excélsior, y explicó que, para ella, “todo es una emocionante aventura”.