Venezuela en la Encrucijada: Análisis de Escenarios

Venezuela enfrenta una crisis de legitimidad bajo el régimen de Nicolás Maduro, quien, a pesar de poder mantenerse en el poder hasta 2025, se enfrenta a una fuerte presión interna y externa

El futuro de Venezuela en juego, continuidad, caída o transición.
La cueva a la que temes entrar guarda el tesoro que buscas. Joseph Campbell

Venezuela se encuentra en una encrucijada histórica. Aunque legalmente Nicolas Maduro puede permanecer en el poder hasta el 10 de enero del 2025, el régimen enfrenta una grave crisis de legitimidad que corroe sus cimientos políticos y sociales.  El país está tutelado por las Fuerzas Armadas y respaldado por aliados internacionales como Irán, Rusia, China y Cuba. La oposición ganó las elecciones, pero el régimen no acepta la derrota, profundizando la crisis y empujando al país hacia un futuro incierto.

En este momento crítico hay varios escenarios posibles con sus variables, por razones de espacio solo resaltamos algunos:

1. Continuidad del Régimen: El Estancamiento Autocrático

En este escenario, Maduro logra mantenerse en el poder, apoyado por las Fuerzas Armadas que reciben beneficios económicos y controlan sectores clave. Este apoyo militar, combinado con la influencia de sus aliados extranjeros, permite al régimen ignorar los resultados electorales y perpetuar su control.

Sin embargo, tendrá consecuencias. A nivel interno, se intensifica la represión y el control social, llevando a una mayor crisis económica y humanitaria. Posible inflación y la escasez de productos básicos agravarían la situación, impulsando a miles de venezolanos a abandonar el país en busca de mejores oportunidades. A nivel internacional, el aislamiento de Venezuela se profundiza, posibles sanciones más severas en especial a las cabezas del régimen. Pues las tradicionales solo perjudican a la población y no logran debilitar al régimen debido al respaldo de sus aliados.

2. Solución Negociada: La Salida Diplomática

Un segundo escenario más optimista contempla una salida negociada. Aquí, actores internacionales como Brasil, México, Colombia, Estados Unidos, la Unión Europea entre otros países, intervienen para facilitar una transición pacífica. Bajo la supervisión de observadores internacionales, tiene variables, desde no deseables para la oposición como nuevas elecciones con garantías de seguridad y transparencia, hasta la salida concertada de las cabezas del régimen con amnistía y/o justicia transicional.

El régimen, consciente de su debilitada posición, buscaría negociar "enclaves de poder" para mantener cierta influencia en la nueva estructura de gobierno. Desde pasar el control de PDVSA, impuestos, aduanas, entre otras instituciones, al congreso para desmembrar el poder presidencial hasta impensables artimañas para entregar un Poder Ejecutivo totalmente debilitado. Esto también podría incluir amnistías para los militares y funcionarios involucrados en la represión, lo que facilitaría el proceso de transición. Aunque esta opción genera controversia, también abre la puerta a una reconstrucción económica y social con el apoyo de la comunidad internacional, que estaría dispuesta a proporcionar ayuda técnica y económica.

3. Caída Militar de Maduro: El Riesgo de la Fractura

En este tercer escenario, la presión interna y externa finalmente provoca una fractura dentro de las Fuerzas Armadas. Facciones disidentes, cansadas de la crisis y el deterioro de la situación, se alían con la oposición y toman el control, derrocando a Maduro. Esto podría llevar a la formación de un gobierno de transición militar que prometa organizar elecciones a mediano plazo.

Sin embargo, este escenario conlleva riesgos significativos. Los gobiernos militares casi nunca conducen a la transición democrática, además, la fractura militar podría desatar enfrentamientos violentos en diversas regiones del país, generando inestabilidad y caos. Por supuesto, existe la posibilidad de que países vecinos intervengan con misiones de paz para evitar un conflicto a gran escala.

4. Colapso por Descontento Generalizado: La Implosión del Régimen

Un cuarto escenario considera un colapso del régimen sin necesidad de un alzamiento armado masivo. El descontento creciente entre los niveles medios y bajos del ejército, junto con la presión interna y externa, podría llevar a una deserción masiva que debilite irreversiblemente el control de Maduro.

En este caso, un gobierno provisional podría formarse rápidamente con el apoyo de sectores descontentos del ejército y la oposición civil. La comunidad internacional, consciente de la oportunidad histórica, se movilizaría para proporcionar apoyo económico y humanitario, asegurando una transición pacífica y estable.

Factores Claves para el Futuro de Venezuela

El desenlace de estos y cualquier otro escenario y sus variables, dependerá de varios factores cruciales. La cohesión y lealtad dentro de las Fuerzas Armadas será determinante para la estabilidad del régimen. Cualquier fractura podría desencadenar cambios drásticos, como golpes de estado o conflictos internos. La presión y el apoyo internacional también jugarán un papel esencial, contrapesando el respaldo que Maduro recibe de países como Rusia, Irán, China y Cuba.

Además, la crisis humanitaria y la migración masiva seguirán siendo factores críticos, no solo desestabilizando la región, sino también motivando respuestas internacionales más drásticas. Finalmente, el impacto geopolítico de la situación en Venezuela, situada en el centro de un tablero internacional más amplio, influirá en las decisiones de las potencias globales y regionales.

La reconstrucción de Venezuela no solo requiere un cambio de liderazgo, sino también la implementación de reformas estructurales que promuevan la transparencia, la justicia y el desarrollo sostenible. Solo a través de un compromiso conjunto y sostenido entre la oposición, la comunidad internacional y las fuerzas sociales y políticas internas se podrá asegurar un futuro próspero y democrático para el pueblo venezolano. El destino de Venezuela está en juego, y los próximos pasos serán cruciales para definir su rumbo.

Nelson Espinal Báez Associate MIT - Harvard Public Disputes Program at Harvard Law School. Presidente Cambridge International Consulting.

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