El coco, cultivo de moda en la zona Este del país

Los frutales de coco, que además forman parte del paisaje tropical en Hato Mayor y las zonas costeras de Sabana de la Mar y Miches, genera más de 1,150 empleos directo.

El coco se está cultivando de forma organizada y ya está dejando buenos resultados. (Manuel Antonio Vega)

Ante los embates sufridos por la producción de cítricos, afectada por la bacteria del HLB, el cultivo de coco para fines de exportación es una alternativa que proyecta buenas resultados para productores, que están dedicando miles de tareas a la palmera de agua dulce.

Hay una fiebre colectiva entre hacendados, que están dedicando gran parte de sus tierras, dejando el ganado y otros sembradíos, para dedicarlo a la producción de coco.

Más de 10 mil tareas están siendo cultivadas por productores de Hato Mayor, El Seibo, Sabana de la Mar y Miches, lo que por el momento está incentivando la mano de obra agrícola, que fue desmotivada por las enfermedades de los cítricos.

Los cultivos y distintas variedades, se llevan a cabo con matas sanas, producidas en viveros certificados, para garantizar una mayor producción y rentabilidad en las inversiones que se están haciendo.

En la zona Este del país se cultiva en gran extensión el Enano Verde Brasileño y el híbrido PB121, un cruce entre las variedades Enano Malayo y Alto Africano, debido a que es el híbrido más resistente al amarillo letal, que es una enfermedad incurable del cocotero, a la cual sólo se ha visto como solución la plantación de variedades tolerantes, como las mencionadas anteriormente.

El Enano Brasileño es una variedad especial para agua, el cual da un buen sabor al néctar del coco, mientras que el Hibrido es para agua y copra, de la cual se extrae la grasa vegetal o aceite de coco.

Solo el Consorcio Citrícola del Este, que es el mayor productor de naranjas, ya ha sembrados unas 4 mil tareas de coco, en terrenos que estaban dedicados a la producción de naranjas.

El coco es visto por los inversionistas como una alternativa viable dentro de la diversificación agrícola en la región.

El empresario Ricardo Barceló, uno de los pilares del negocio del coco aprecia un futuro promisorio al cultivo, que desde ya está reportando buenos resultados.

Recomendó a los iniciadores del cultivo de coco a tener un control estricto, para eliminar los insectos y escarabajos que atacan las plantaciones, que son menos letales, que los que atacan a la producción de cítricos.

Sostiene que la fruta tropical es de buen manejo, por la buena pluviometría y los terrenos donde se han plantado.

Cifras

La superficie cosechada en el país ha aumentado casi un 200% en los últimos siete años, para totalizar alrededor de 2.8 millones de tareas en desde el 2011.

Las empresas procesadoras y exportadoras de coco en el país generan más de 40 millones de dólares por año.

Los frutales de coco, que además forman parte del paisaje tropical en Hato Mayor y las zonas costeras de Sabana de la Mar y Miches, genera además más de mil 150 empleos directo.

El coco además de Hato Mayor, se produce a gran escala en las provincias de María Trinidad Sánchez. El Seibo, La Altagracia, Neyba, Cabral, Barahona y Samaná.

Al ritmo que va la siembra y la fiebre que tienen los productores por introducirse en el cultivo, prontamente Hato Mayor, será llamada también la “Capital del Coco”.

El cocotero es un cultivo que reviste gran importancia, en el campo económico y como cultivo de subsistencia, esto último porque el árbol completo y el fruto es utilizado como materia prima para obtener diversas gamas de productos, que son utilizados desde en los campos de la gastronomía hasta lo medicinal.

La República Dominicana está produciendo más de 280 mil toneladas de coco anualmente, de los cuales más de 90 millones de unidades va a la industrialización, 30 millones a la exportación, 22 millones es dirigido al mercado haitiano y cinco millones para el consumo del agua de coco.

Se considera la palmera más cultivada en mundo, provee mayor variedad de derivados y excelente productora de grasa vegetal.

En muchos casos sus derivados son utilizados en la cosmética como humectante, y extraer jabones para el cuidado de la piel.

La República Dominicana está entre los 20 países mayor productor del coco del mundo, con más de 235 millones de unidades anuales, que arrojan RD$ 1.6 millones.

El grupo de Empresas Barceló, que se ha insertado en el cultivo de coco, están sembrando con nueva tecnológica y usando nuevas variedades, lo que a juicio del productor Ricardo Barceló, que con ello busca rescatar la siembra y lograr mayor rentabilidad.