José Ramírez llegará al último mes con opciones de lograr el 40-40

En las Grandes Ligas de más controles antidopaje, con los lanzamientos más veloces de la historia y el volumen más alto de información para anular a los bateadores, la ofensiva de Aaron Judge y Shohei Ohtani monopoliza al resto, si bien sobran las actuaciones como para repartir el protagonismo; Juan Soto, Marcell Ozuna, Bobby Witt, Josh Naylor, Ketel Marte… 

En ese grupo, y con el bajo perfil que le caracteriza en la fría Cleveland, José Ramírez entrará al último mes de la temporada con las opciones abiertas de ingresar a un círculo exclusivo, uno que Ohtani acaba de ampliar.

Ramírez arrancó la semana final de agosto con 33 cuadrangulares y 32 bases robadas, la segunda vez en su carrera que logra el 30-30 tras 2018, una hazaña que se ha logrado en 69 ocasiones. 

Esos 30 partidos que restan de calendario a los Guardianes a partir de este martes abren el camino para que el banilejo coquetee con subir más el listón e incrustar su nombre en el club de los 40-40.

Es uno en el que solo están José Canseco (1988), Barry Bonds (1996), Alex Rodríguez (1998), Alfonso Soriano (2006), Ronald Acuña (2023) y Ohtani (2024).

ZiPS, una popular fórmula de proyección que utiliza FanGraphs, estima que el dominicano finalizará con 40 vuelacercas y 38 robos. 

Más robador

Se trata de un Ramírez, de 31 años, que ha recuperado la iniciativa en el robo de bases con la ampliación de las almohadillas la temporada pasada. 

Este 2024, “La Para” solo ha sido atrapado en cuatro de los 36 intentos que ha intentado si bien su porcentaje de embasarse y de boletos es el segundo más bajo en temporadas donde superó los 130 encuentros.

Esta campaña llegó a salvo el 88.8% de las veces que salió al robo, un porcentaje por encima de su media de por vida, un 82.8% (234 de 286 intentos). 

Es una proporción mayor a de su compatriota Elly de la Cruz, el líder de robos en toda la MLB, quien roza el 83.5% tras acertar en 61 de las 73 ocasiones en las que ha salido a estafar cojines.

Tras Ramírez lograr 34 hurtos en 40 intentos ese 2018 (85%) en lo adelante redujo el ritmo si bien en las últimas dos zafras lideró la Liga Nacional en boletos intencionales (20 y 22), una estrategia de los rivales como temor a su poderío ofensivo. 

Conseguir el 40-40 serían un adorno más para un Ramírez que desde 2017 ha terminado siete veces entre los primeros 10 al Jugador Más Valioso.