Poco que celebrar en el Día Internacional de la Diversidad Biológica

El Covid-19 es resultado de la captura y comercialización de animales silvestres

Hoy 22 de mayo se “celebra” el día internacional de la diversidad biológica o biodiversidad, en medio de una pandemia por el Covid-19, que irónicamente tiene su origen por la captura y comercialización de especies silvestres en Asía.

No hay mucho que celebrar cuando el ser humano está siendo responsable de la desaparición constante y acelerada de la biodiversidad a nivel global.

Este es un día para reflexionar sobre el daño que le estamos causando a las poblaciones de flora y fauna, marina y terrestre del planeta.

Se calcular que más de 120 especies de animales se han extinto en los últimos años, sin contar los insectos. Otras tantas especies han entrado en la lista de amenazadas a nivel global.

Más de 25.000 animales y plantas están en peligro de extinción, según la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN).

Según la IUCN para el año 2050 especies como la tortuga angonoka, el pangolín, la vaquita marina, el ajolote, los gorilas occidentales del río Cross, el visón europeo, el atún rojo del sur, el lemur cariancho, la iguana de Jamaica y otras especies habrán desaparecido para siempre.

Calentamiento global, reducción de hábitat, deforestación, contaminación, caza indiscriminada y furtiva, son las principales razones que están llevando a las especies a un futuro incierto si no tomamos medidas drásticas para frenar su desaparición.

República Dominicana no es la excepción. La reducción de los hábitats, la sobre pesca, la caza furtiva, contaminación y deforestación son las principales amenazas a nuestra biodiversidad.

Las áreas protegidas se ven presionadas por el avance de la agricultura a gran escala, como en Sierra de Bahoruco y Valle Nuevo. Dos de los grandes refugios de la biodiversidad de la región. Mucho se ha documentado y denunciado, pero poco se ha resuelto en los últimos años.

A pesar de eso se siguen descubriendo nuevas especies para la ciencia, como tres nuevas aristolochias recientemente descritas por el investigador Eladio Fernández, entre otros reptiles y anfibios.

La lucha por científicos y coservacionistas es constante en nuestro país. Ejemplo de eso es el programa de rescate y conservación del Gavilán de la Hispaniola, especie endémica al borde de la extinción, cuyos esfuerzos ya están dando resultados.

El programa de monitoreo y protección de tortugas marinas, que a pesar de los esfuerzos de conservación siguen siendo cazadas y sus huevos consumidos, como esta tortuga tinglar asesinada en playa Macao a principios de esta semana.

Diferentes organizaciones sin fines de lucro y la Red Arrecifal Dominicana se niegan a que nuestros arrecifes de coral desaparezcan, implementando programas de reproducción y siembra de coral.

Un Grupo Jaragua, que entre otras actividades, lucha por que no desaparezcan nuestras dos impresionantes iguanas endémicas, siendo la de Ricord críticamente amenazada.

Tenemos ballenas jorobadas que viajan miles de kilómetros cada año para reproducirse en nuestro santuario de mamíferos marinos, cuya actividad de observación genera millones de pesos anualmente al país. Nuestro solenodonte, un fósil viviente, siendo uno de los dos mamíferos venenosos del planeta que está perdiendo hábitat en la isla. Además nuestro pequeño zumbadorcito que es la segunda ave más pequeña del mundo, pero posee el record del nido y huevos más pequeños. Vivos ejemplos de la rica biodiversidad que poseemos.

Diario Libre consultó a Carlos Suriel, Encargado del Departamento de Investigación y Conservación del Museo Nacional de Historia Natural “Prof. Eugenio de Jesús Marcano” sobre nuestra biodiversidad.

Carlos Suriel

¿Qué importancia tiene preservar la biodiversidad?

Este viernes 22 de mayo se celebra el Día Internacional de la Diversidad Biológica. Este día se celebra por decisión de la Asamblea General de las Naciones Unidas desde hace 20 años. La interacción entre la ciencia y la política favoreció el origen y uso del nuevo término biodiversididad en la década de 1980, como un concepto englobador que, a su vez, permitió amplificar el significado de la diversidad biológica, como el conjunto de la variabilidad entre los organismos vivos de todas las categorías, así como las múltiples relaciones entre ellos y con su ambiente.

La biodiversidad incluye la variabilidad dentro de cada especie y entre las diferentes especies, la variabilidad de sus acervos génicos, de su comportamiento y de los ecosistemas terrestres y acuáticos de los cuales forman parte. Decir “importante” no es suficiente para describir el significado de la biodiversidad, los recursos biológicos son esenciales para la existencia humana. La alimentación de la población humana mundial se sostiene en la diversidad de plantas existentes y en las proteínas que nos proporcionan los animales. La conservación y el uso sostenible de la biodiversidad debería ser nuestro compromiso de mayor envergadura para con las generaciones presentes y futuras.

Pero la realidad no se corresponde con lo que se esperaría de una humanidad inteligente y sensata, nos comportamos como si tuviéramos un plan B, estamos destruyendo los propios pilares en que nos sostenemos. La propia Organización de las Naciones Unidas acaba de llamar la atención sobre el fracaso que se perfila en el cumplimiento de varios de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS): se estima que alrededor de un millón de especies están amenazadas por la extinción, tres cuartos de los ecosistemas terrestres y cerca de 66% de los ecosistemas marinos están seriamente alterados. Muchos especialistas hablan de que estamos viviendo la sexta gran extinción, mayor que aquella que extinguió a los dinosaurios hace 65 millones de años, y esta es una extinción masiva provocada por nosotros mismos.

La propia situación actual de la pandemia del SARS-CoV2, causante del COVID-19, es un triste y dramático reflejo de esta situación. Los saltos zoonóticos de virus, es decir, el paso hacia la sangre humana de virus que existen de manera normal en los animales, se han producido, y se seguirán produciendo, debido a la alteración de los ecosistemas, la invasión agresiva en los hábitats de las especies y el uso desaprensivo de la fauna silvestre. Hoy es el COVID-19, mañana serán otras epidemias, y otras catástrofes parecidas, por resistirnos a vivir en armonía con la naturaleza y respetar la diversidad biológica.

¿Qué hace el Museo Nacional de Historia Natural para conservar la biodiversidad de la isla?

El conocimiento y la conservación de la biodiversidad es lo que da razón de existencia al Museo Nacional de Historia Natural “Prof. Eugenio de Jesús Marcano”. Este ideal es el fundamento de todas las actividades del Museo, y se encuentra explícito en la proclamación de su Misión y sus Objetivos en la planificación estratégica y en la carta de compromiso con los ciudadanos. Realizamos continuamente investigaciones de nuestra fauna, cuyos resultados son difundidos en revistas científicas y materiales educativos, pero también favorecemos y colaboramos con investigaciones sobre la biodiversidad de la isla que realizan investigadores de diferentes países; tenemos la más grande y diversa colección científica de referencia de la fauna de La Hispaniola, con alrededor de 120 mil especímenes, esta colección está catalogada y registrada en bases de datos, siendo un recurso sumamente importante para el estudio de nuestra fauna.

El Museo realiza una amplia variedad de actividades educativas, presenciales y virtuales, dirigidas a concienciar sobre la importancia de la biodiversidad y la necesidad de su conservación, pensadas principalmente para los niños y adolescentes, el futuro de la nación.

La existencia de este Museo de Historia Natural en República Dominicana juega hoy un papel trascendental en la región. El Caribe constituye una de las regiones de mayor diversidad biológica en el planeta, es uno de los puntos calientes (HotSpot) de biodiversidad. Nuestras islas son importantes centros de diversidad de especies, de endemismo y variabilidad de ecosistemas. Pero como islas somos también más vulnerables, los efectos del cambio climático son mayores y nuestra capacidad de resiliencia es menor; cada vez son más frecuentes e intensos los huracanes, las sequías son recurrentes y las playas sufren daños y amenazas, para citar solo tres ejemplos.

El Museo Nacional de Historia Natural “Prof. Eugenio de Jesús Marcano” es hoy un centro científico y educativo, en el que confluyen esfuerzos de otros estados insulares vecinos, así como de Norteamérica y Europa, en el conocimiento de la diversidad biológica, un estado imprescindible para que su conservación y uso sostenible sean realizables. El Día Internacional de la Diversidad Biológica, este viernes 22 de mayo, lo estamos celebrando con varias actividades, siendo una de ellas precisamente la publicación de la guía ilustrada Murciélagos de la Hispaniola, un valioso documento que presenta 18 de las 20 especies de estos mamíferos reportados para la isla. El vínculo para la descarga de este material científico-educativo está disponible a través de nuestras plataformas de redes sociales.

Para más información sobre el museo visita: https://mnhn.gov.do/

Guatemalteco con estudios en Ciencias de la Comunicación y amplia experiencia en el campo visual y multimedia. Ha trabajado para varios medios de comunicación en Guatemala y República Dominicana, y sus fotografías han aparecido en importantes publicaciones en diferentes partes del mundo.