Un brote de difteria causa diez muertos en la República Dominicana
Hasta el momento se han detectado 19 casos, en su gran mayoría de niños de entre 2 y 11 años
Un brote de difteria causó la muerte a 10 personas en las últimas semanas en la República Dominicana, según cifras oficiales divulgadas este miércoles, una situación que los médicos atribuyen a una relajación en el plan de vacunación a causa de la covid-19.
Hasta el momento se han detectado 19 casos, con 10 fallecimientos, en su gran mayoría de niños de entre 2 y 11 años, aunque las autoridades no han ofrecido datos de la última víctima.
La mayoría de casos están concentrados en el municipio de Yamasá, localidad situada a unos 50 kilómetros al norte de Santo Domingo.
Ninguno de los pacientes afectados había completado el plan de vacunación, según afirmó este miércoles en una rueda de prensa la epidemióloga Acerina Gilbert, del Programa Ampliado de Inmunización del Ministerio de Salud Pública.
El presidente del Colegio Médico Dominicano (CMD), Waldo Ariel Suero, dijo a Efe que tanto las autoridades como los padres 'bajaron la guardia' durante la pandemia, lo que provocó que muchos niños no completaran el esquema de vacunación correspondiente, que comprende enfermedades como la difteria, tos ferina y sarampión.
'Se prestó atención solo al covid', afirmó Suero, quien señaló que los casos de difteria 'representan un riesgo para el país'.
El Ministerio de Salud Pública emitió el pasado 8 de abril una alerta epidemiológica a causa de la difteria y esta semana inició una intervención en Yamasá, en el que se está reforzando la vacunación.
En los últimos días muchas personas que se han acercado a puestos de vacunación, en especial en Yamasá, donde se han llegado a acabar las vacunas, según medios locales.
La República Dominicana registró 3 casos de difteria el año pasado y el último brote de la enfermedad fue en 2004, cuando se confirmaron 122 casos.
La difteria es una enfermedad bacteriana aguda que afecta principalmente la mucosa de vías respiratorias superiores (nariz, amígdalas, faringe, laringe) y la piel.
Sus signos y síntomas, que suelen manifestarse entre 2 y 5 días después de la exposición, pueden ser desde leves hasta graves, aunque la infección asintomática es la más frecuente.