Trabajadores protestan contra racismo y desigualdad en EEUU
Empleados de la industria de servicios, de cadenas de comida rápida y de la economía de plataformas se sumaron el lunes a trabajadores sindicalizados para protestar contra el racismo sistémico y la desigualdad económica, montando manifestaciones en todo Estados Unidos en busca de un mejor trato a las personas de raza negra en los sitios de trabajo.
Los organizadores dijeron que decenas de miles de trabajadores en 160 ciudades realizaron paros inspirados en el reconocimiento racial que surgió luego de las muertes de varias personas de raza negra a manos de la policía. El apoyo visible se produjo en gran medida en la forma de protestas que atrajeron a personas cuyos empleos en el sector de atención médica, transporte y construcción no les permitieron trabajar desde casa durante la pandemia de coronavirus.
“Lo que los manifestantes están diciendo, es que si queremos estar preocupados, y deberíamos, por la violencia policial y gente falleciendo a manos de la policía... también debemos estar preocupados por las personas que están muriendo y son llevadas a situaciones letales a través de la explotación económica en todo el país”, dijo a The Associated Press el reverendo William Barber II, copresidente de Poor's People's Campaign, una de las organizaciones que apoyaron la huelga.
Barber dijo que la participación del lunes mostró la importancia del problema para las personas que están dispuestas a salir durante una pandemia y hacer que se escuche su voz.
“Tristemente, si no están en la calles, los sistemas políticos no se mueven porque envíen un correo electrónico o un tuit. Lo ignoran”, comentó.
El paro llamado “Strike for Black Lives” fue organizado y respaldado por más de 60 sindicatos y organizaciones sociales y de justicia racial, que realizaron diversos eventos en más de una veintena de ciudades. El apoyo superó las expectativas, señalaron los organizadores, aunque no se contaba con una cifra exacta de personas que participaron.
Donde no se pudieron realizar huelgas durante todo el día, los participantes protestaron durante el receso para comer o guardaron un minuto de silencio mientras se arrodillaban para honrar a las víctimas de la brutalidad policial, como George Floyd, un afroestadounidense que falleció en Minneapolis mientras estaba bajo custodia de la policía a finales de mayo.
En San Francisco, 1.500 conserjes dejaron sus trabajos y marcharon al ayuntamiento. Los cocineros y cajeros de McDonald’s en Los Ángeles y los trabajadores de los asilos de ancianos en St. Paul, Minnesota, también participaron en la huelga, según los organizadores.
En un local de McDonald’s en Los Ángeles, los trabajadores bloquearon el servicio al auto durante 8 minutos y 46 segundos, aproximadamente la cantidad de tiempo que, de acuerdo a los fiscales, un policía blanco mantuvo su rodilla sobre el cuello de Floyd mientras éste decía que no podía respirar.