Fuga en prisión de Haití deja 25 muertos y 200 escapados
Uno de los reclusos fugados que murió fue Arnel Joseph, uno de los principales líderes de bandas del país
Más de 200 presos son “activamente buscados” por la policía en Haití luego de una fuga el jueves en la que murieron 25 personas, entre ellas el director de la prisión ubicada en las afueras de la capital, anunciaron este viernes las autoridades.
“La policía trabaja para recuperarlos. Algunos tienen esposas, por lo que no podrán ir lejos”, dijo en la noche del viernes Frantz Exantus, secretario de Estado de comunicación.
Durante una rueda de prensa más temprano Exantus, había explicado que antes del incidente había 1.542 presos en la prisión de Croix-des-Bouquets y que el recuento realizado en la mañana del viernes muestra que había entonces 1.125.
“Veinticinco personas murieron, incluidos seis prisioneros y el inspector Paul Hector Joseph, que estaba a cargo de la prisión”, agregó Exantus.
“Entre los muertos, algunos son ciudadanos de a pie que fueron asesinados por los presos durante su fuga”, lamentó el representante del gobierno.
Uno de los reclusos fugados que murió fue Arnel Joseph, uno de los principales líderes de bandas del país, asesinado a tiros el viernes durante un control policial a 120 kilómetros al norte de la prisión de Croix-des-Bouquets.
“Arnel Joseph murió mientras atacaba a una patrulla policial que había detenido la motocicleta en la que viajaba. La policía tomó represalias y Arnel Joseph está muerto”, detalló Exantus.
Acusado de ser el jefe de una de las principales redes criminales de Haití, Joseph fue arrestado en julio de 2019.
Josehp había intentado, sin éxito, escapar por primera vez de la prisión de Croix-des-Bouquets en julio de 2020, una fuga que había anunciado a través de un video publicado en las redes sociales unos días antes.
Joseph, que cumplía condena por asesinato, ya había escapado dos veces de otra prisión de Puerto Príncipe en 2010 y 2017.
Inaugurada en 2012, la prisión de alta seguridad de Croix-des-Bouquets, construida con fondos de Canadá, tiene una capacidad máxima de 872 reclusos, aunque el jueves, antes de la fuga, la población era casi el doble.