El paradójico intercambio entre el gobernador Andrew Cuomo y una periodista

El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, comenzó hoy su conferencia de prensa comparando los 53 días que lleva cerrado el estado, con eventos como la Primera Guerra Mundial y la Segunda, la guerra de Vietnam, el brote de cólera en 1910 y la pandemia de influenza H1N1 en 1918.

“¿53 días es poco tiempo o mucho tiempo? Mirando atrás, comparado con lo que otras generaciones han soportado en otros períodos de crisis en este país, 53 días es nada”, expresó Cuomo.

Y luego de culminar su alocución y durante la sesión de preguntas y respuestas, tuvo un interesante intercambio con una de las periodistas.

La comunicadora interrogó a Andrew Cuomo sobre algunos manifestantes en los alrededores del ayuntamiento, quienes exigen que se les permita volver a trabajar porque no han recibido la ayuda del Gobierno y sus ahorros se están acabando.

“Su punto es que ‘la cura no puede ser peor que la enfermedad en sí’, ¿cuál es su respuesta a eso?”, cuestionó la periodista.

“La enfermedad es la muerte. ¿Qué es peor que la muerte?”, comenzó a responder Cuomo. Y la periodista interrumpió:

-Sí, pero, ¿qué de aquellos que cometen suicidio porque no pueden cumplir con sus pagos?

-Sí, pero la enfermedad es quizás mi muerte en oposición a la tuya. Tú dijiste que ellos dijeron que la cura es peor que la enfermedad. La enfermedad es la muerte. ¿Cómo puede ser la cura peor que la enfermedad si ésta es potencialmente la muerte?

La periodista insistió entonces con que la caída de la economía podría afectar la salud mental de las personas encerradas en sus casas.

Andrew arremetió:

-No es igual a la muerte. Dificultad económica, sí, muy malo, pero no es morir. Estrés emocional por estar encerrado en la casa, sí, muy malo, pero no es morir. Violencia doméstica en aumento, muy malo, pero no es morir. Y, además, no es la muerte de alguien más.

El gobernador presentó hoy un plan que permitirá a las autoridades controlar mejor el contagio y continuar bajando la curva que desde hace una semana ha ido en descenso.

Se doblará el número de pruebas a personas y aquellos que resulten positivos permanecerán en cuarentena, pero también se hará un rastreo de esos ciudadanos con los cuales esos positivos tuvieron contacto para aislarlos.

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Ariel Pérez