Detectives recuperan cuatro aretes de diamantes tragados por sospechoso tras arresto
Luego de recuperar las joyas, el hombre de Texas fue llevado a la cárcel del condado de Orange, donde enfrenta cargos de robo con máscara y hurto mayor

Detectives recuperaron cuatro aretes de diamantes de un presunto ladrón dos semanas después de que se tragara las joyas de Tiffany & Co. valoradas en casi 770,000 dólares durante su arresto al costado de una carretera en el Panhandle de Florida, dijeron las autoridades el viernes.
El último de los cuatro aretes robados de la tienda Tiffany en Orlando fue recuperado del sospechoso la semana pasada, dijo el viernes el Departamento de Policía de Orlando.
Tres de los pendientes se recuperaron dos días antes, junto con otros dos pendientes de diamantes no identificados. El sospechoso fue trasladado de la cárcel a un hospital mientras los detectives esperaban para recolectar las pruebas, según informaron las autoridades policiales en un comunicado.
- Los cuatro aretes robados coincidían con los números de serie de las joyas sustraídas de la tienda Tiffany el mes pasado, dijeron los detectives.
Luego de recuperar las joyas, el hombre de Texas fue llevado a la cárcel del condado de Orange, donde enfrenta cargos de robo con máscara y hurto mayor en primer grado.
Durante el robo, el hombre supuestamente les dijo a los vendedores de Tiffany que estaba interesado en comprar aretes y un anillo de diamantes para un jugador de baloncesto de los Orlando Magic. Los vendedores lo acompañaron a una sala VIP donde pudo ver las joyas.
Poco después, saltó de la silla, agarró las joyas e intentó forzar la salida.
Rastreo policial
Los detectives obtuvieron la matrícula del auto del sospechoso a través de las cámaras de seguridad de un centro comercial y creen que regresaba a Texas. La policía estatal rastreó el auto mediante lectores de etiquetas en la autopista de peaje de Florida y la Interestatal 10 hasta que lo detuvieron por conducir sin luces traseras en el condado de Washington, a casi 550 kilómetros (340 millas) de distancia, según el informe de la policía de Orlando.
En el coche patrulla, un policía estatal escuchó al sospechoso decir: "Debería haberlos tirado por la ventana", y en la cárcel del condado de Washington preguntó al personal: "¿Me van a acusar de lo que tengo en el estómago?", según el informe del arresto.