Blink Fitness, un operador de gimnasios a bajo costo en EE. UU. se declara en bancarrota
Blink Fitness enfrenta crisis financiera con su declaración de bancarrota en el Capítulo 11.
AP
El operador de gimnasios Blink Fitness ha solicitado la protección por bancarrota del Capítulo 11.
Blink, una cadena propiedad de Equinox con más de 100 ubicaciones, dijo el lunes que se estaba declarando en bancarrota para ayudar a facilitar la venta del negocio. La compañía con sede en Nueva York agregó que sus gimnasios permanecen abiertos, y Blink les dijo a sus miembros que anticipa un "impacto limitado en las operaciones diarias" a través del proceso.
También el lunes, Blink dijo que recibió un compromiso de 21 millones de dólares en nueva financiación de los prestamistas existentes para ayudar a respaldar sus operaciones en curso, a la espera de la aprobación judicial. Se espera que los salarios de los empleados y los pagos a los proveedores continúen sin interrupción.
Fundado en 2011, Blink se ha anunciado durante mucho tiempo como un gimnasio asequible "para todos los cuerpos". Los planes de membresía oscilan entre US$ 15 y US$ 39 por mes, competitivos con las tarifas de rivales más grandes como Planet Fitness y LA Fitness. Blink es una cadena más pequeña que opera en siete estados de EE. UU.: Nueva York, Nueva Jersey, Pensilvania, California, Illinois, Massachusetts y Texas.
En su petición del Capítulo 11, que se presentó en el tribunal de quiebras de Delaware, Blink enumeró activos y pasivos en el rango de 100 a 500 millones de dólares. El lunes, la compañía dijo que ha visto una "mejora continua" en el desempeño financiero reciente, con un aumento de los ingresos del 40 % en los últimos dos años.
Blink también señaló los esfuerzos recientemente anunciados para impulsar las experiencias de los miembros en sus gimnasios más populares. La declaración de bancarrota del lunes se produce pocos meses después de que la compañía anunciara una inversión multimillonaria que incluyó la actualización de 30 de sus ubicaciones más concurridas con más de 1,700 equipos nuevos.
En un comunicado, el presidente y director ejecutivo de Blink Fitness, Guy Harkless, dijo que el liderazgo de la compañía determinó que el uso de un proceso supervisado por un tribunal para facilitar una venta "es el mejor camino a seguir para Blink y ayudará a garantizar que Blink siga siendo el destino para todas las personas que buscan un gimnasio inclusivo y centrado en la comunidad".
Blink no proporcionó de inmediato muchos detalles sobre la venta que está llevando a cabo. La cadena es actualmente propiedad de la empresa de fitness de lujo Equinox Group, cuyas marcas también incluyen Soul Cycle, Pure Yoga y Equinox Fitness Clubs. Los precios de membresía de esos clubes son mucho más caros que las tarifas de Blink.
La declaración de bancarrota de Blink llega cuando gran parte de la industria del fitness trabaja para recuperarse de las pérdidas de la era de la pandemia. Los gimnasios y estudios de entrenamiento estuvieron entre los más afectados durante los primeros días de COVID-19, ya que los confinamientos cerraron muchas operaciones o limitaron significativamente la cantidad de personas que dichas empresas podían permitir ingresar para hacer ejercicios.
Pero los gimnasios que superaron lo peor han visto cierta estabilidad desde entonces. Las visitas a las principales cadenas de gimnasios aumentaron casi todas las semanas entre enero y abril de este año en comparación con las cifras de 2023, según datos recientes de Placer.ai, que rastrea el tráfico minorista y peatonal.
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