EE.UU. aplaude el anuncio chino de regular tres químicos usados para fabricar fentanilo
Un paso crucial en la alianza EE.UU.-China
El Gobierno estadounidense consideró este martes como "un valioso paso adelante" el anuncio del Gobierno chino de establecer mayores controles y regulaciones para tres químicos utilizados para fabricar el fentanilo.
La medida supone la tercera iniciativa "significativa" tomada por el Gobierno chino desde que los presidentes de EE.UU., Joe Biden, y China, Xi Jinping, acercaron sus lazos diplomáticos en noviembre pasado en una reunión en San Francisco (California), dijo el portavoz interino del Consejo de Seguridad Nacional (NSC, en inglés), Sean Savett, en un comunicado.
La Casa Blanca ha estrechado la colaboración con China en el combate contra el tráfico de fentanilo.
La semana pasada, funcionarios de alto rango de ambos gobiernos se reunieron en Washington para abordar la "coordinación" entre EE.UU. y China para asfixiar el financiamiento de las redes que importan precursores de fentanilo hacia Norteamérica.
Igualmente, analizaron las acciones que el gobierno asiático puede tomar para "cerrar" las compañías proveedoras de estos químicos, según detallaron los funcionarios estadounidenses.
Además de la presión para que China amplíe la lista de sustancias consideradas ilícitas, el Gobierno Biden busca ampliar los canales de intercambio de información entre ambos sobre este tema e interrumpir la financiación ilícita de las organizaciones criminales transnacionales.
Estados Unidos ve la lucha contra el fentanilo como el "asunto más vital para la seguridad" de los ciudadanos, según indicó el encargado de América Latina para el Departamento de Estado, Brian Nichols, ante una audiencia en el Congreso a finales de junio.
Según la Administración Biden, los cárteles mexicanos fabrican este opioide sintético a partir de precursores químicos que adquieren de China y luego los trafican en Estados Unidos, país que sufre la peor crisis de opiáceos de su historia.
El pasado 1 de julio, las autoridades fronterizas decomisaron 4 millones de píldoras azules de fentanilo, con un peso de más de 1,000 libras (453 kilogramos), lo que supone la mayor incautación de esta droga en la historia realizada en la frontera suroeste de Estados Unidos.