Las banderas estadounidenses deberán ser fabricadas en el país, dice el Congreso
Un símbolo de identidad y empleo
Pronto, la bandera de Estados Unidos deberá de ser producida en el país.
El Congreso aprobó una propuesta para exigir al gobierno federal que sólo compre banderas estadounidenses que hayan sido fabricadas íntegramente en el país. Estados Unidos importa millones de banderas estadounidenses del extranjero, en su mayoría de China, y los promotores de la propuesta afirman que ya es hora de que las banderas estadounidenses tengan su origen en el país al que representan.
Los partidarios de la propuesta, encabezados por la senadora republicana Susan Collins y el senador demócrata Sherrod Brown, dijeron que el cambio es algo más que simbólico: creen que apoyará el empleo y a los fabricantes estadounidenses, al tiempo que preservará el estandarte más reconocido de la nación.
"La bandera estadounidense es un símbolo de nuestra identidad, determinación y valores como pueblo. Para honrar su significado, el gobierno federal debería utilizar únicamente banderas fabricadas íntegramente en Estados Unidos", dijo Collins.
Los partidarios de la propuesta dijeron el lunes que esperan que la medida sea promulgada pronto. Fue enviada al presidente Joe Biden el jueves.
Las normas federales exigen actualmente que el gobierno compre banderas que contengan la mitad de materiales fabricados en Estados Unidos, dijeron los partidarios de la propuesta. El cambio de normativa, denominado "All American Flag Act", exige que las banderas compradas por el gobierno se produzcan íntegramente con materiales de fabricación estadounidense, así como que se fabriquen en Estados Unidos.
El valor de las importaciones de banderas estadounidenses en 2015 superó con creces los 4 millones de dólares, según datos federales. La gran mayoría de esas importaciones procedían de China, según los partidarios del cambio de norma.
En 2017, Estados Unidos importó unas 10 millones de banderas estadounidenses, y el 99,5% de ellas procedían de China, según los partidarios de la propuesta. Esas cifras incluyen todas las banderas estadounidenses importadas al país y no sólo las compradas por el gobierno federal.
Collins y Brown llevan varios años presionando para que las banderas americanas se fabriquen en Estados Unidos. Los anteriores intentos de cambiar la normativa para exigir banderas fabricadas en Estados Unidos tuvieron éxito en el Senado, pero se estancaron cuando llegaron a la Cámara de Representantes.