Biden no acepta preguntas en su primera comparecencia en la Casa Blanca tras el debate
Fallo del Supremo sobre Trump es un "peligroso precedente"
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, no aceptó este lunes preguntas de la prensa en su primera comparecencia ante los medios de comunicación en la Casa Blanca después del debate del 27 de junio contra su posible rival para las elecciones de noviembre, el exmandatario Donald Trump (2017-2021).
Sus declaraciones, que duraron unos cinco minutos, se centraron en la decisión de este lunes del Tribunal Supremo que concedió una inmunidad parcial a Trump por sus esfuerzos como presidente para revertir el resultado de las elecciones de 2020, que desembocaron en el asalto al Capitolio.
Biden dijo que ese fallo sienta un "peligroso precedente" al determinar que cualquier presidente "puede sentirse libre de ignorar la ley" sin enfrentar consecuencias y consideró que, ahora, recae en el pueblo estadounidense "emitir un juicio" sobre el comportamiento de Trump, en alusión a las elecciones de noviembre.
Al término de su comparecencia, el presidente se retiró del podio y caminó para salir por las puertas de la sala mientras los periodistas le gritaban preguntas sobre el debate y sobre las críticas de algunos demócratas, que piden que ponga fin a su campaña de reelección.
En la Casa Blanca, los periodistas recurren con frecuencia a gritar preguntas al presidente para obtener respuestas, aunque sean breves, ya que un "sí" o un "no" puede acabar siendo noticia, según explica la Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca (WHCA, por sus siglas en inglés) en su página web.
La comparecencia de Biden esta noche no estaba en la agenda oficial que la Casa Blanca envió a los periodistas el domingo por la noche. Fue añadida a última hora por la tarde, explicando que el presidente ofrecería unas declaraciones que estarían centradas en "la decisión del Supremo sobre la inmunidad", según el aviso difundido.
Esta era la primera vez que Biden se enfrentaba a los periodistas que cubren la Casa Blanca después del debate frente a Trump, en el que proyectó una imagen envejecida, con voz ronca y dificultades para concluir algunas de sus frases.
La actuación en ese debate de Biden, que con 81 años es el presidente de más edad en la historia de EE.UU., no sirvió para disipar las dudas de los votantes sobre su capacidad para gobernar. En lugar de eso, su actuación provocó la reacción contraria con voces del Partido Demócrata pidiendo pública y privadamente su retirada.
El viernes, tras el debate, Biden participó en un mitin en Carolina del Norte y, durante el fin de semana, asistió a actos de recaudación de fondos en Nueva York y Nueva Jersey.
Sin embargo, esta era la primera vez en la que los periodistas tenían la oportunidad de hacerle preguntas directamente. En este tipo de escenarios, Biden en algunas ocasiones ha respondido a los reporteros, pero en otras, como hoy, ha salido de la sala ignorando preguntas.
Hasta ahora, Biden no ha dado ninguna señal de que quiera retirarse de la carrera por la Casa Blanca e influyentes figuras del Partido Demócrata han cerrado filas en torno a él.
Entre otros, el expresidente Barack Obama (2009-2017) y la exsecretaria de Estado y excandidata presidencial demócrata Hillary Clinton han restado importancia a la mala actuación de Biden, atribuyéndola a una mala noche y han pedido compararla con la alternativa: Donald Trump.