El regreso a la Tierra del primer vuelo tripulado de Boeing se pospone por nuevas fugas
Fugas de helio y el clima retrasan misión tripulada en la EEI
La primera misión espacial tripulada de la empresa Boeing, que llegó el pasado 6 de junio a la Estación Espacial Internacional (EEI), ha retrasado cuatro días su regreso a la Tierra, que estaba previsto para mañana viernes, debido a filtraciones de helio.
La nave ya había tenido problemas técnicos para su lanzamiento desde Florida -entre ellos fugas de helio- que retrasaron la misión durante casi un año.
Según Boeing, la cápsula tripulada por los astronautas Barry "Butch" Wilmore y Sunita "Suni" Williams, ha presentado cinco fugas de helio, el gas que se utiliza en los sistemas de propulsión de las naves espaciales para permitir que los propulsores se enciendan.
La compañía evalúa si habrá impactos debido a estas fugas en los colectores de helio del módulo de servicio.
La NASA ha ampliado así la misión cuatro días más, hasta el 18 de junio, para dar tiempo a la solución de estos problemas.
La agencia espacial estadounidense tenía previsto regresar a la Tierra el viernes, pero ahora además de las fugas analiza condiciones climáticas y cuestiones de programación de la EEI, como caminatas espaciales de otros astronautas a bordo de la estación.
Debido a esa combinación de factores, la nave Starliner podría retrasar aún más su regreso a Nuevo México, Arizona u otro estado, sitios que están contemplados para el aterrizaje, dependiendo de las condiciones meteorológicas.
La misión permitirá a Boeing obtener las certificaciones necesarias para operar como un segundo proveedor de transporte de carga y tripulación a la EEI, como ya lo hace SpaceX tras millonarios contratos que ambas firmas privadas han suscrito con la NASA.
La nave está encajada en el módulo Harmony de la EEI y tenía previsto permanecer una semana en este laboratorio orbital antes de emprender el retorno, el 14 de junio.
La misión CFT (siglas en inglés de Crew Flight Test) despegó tras superar una serie de problemas en las últimas semanas antes de su partida, relacionados tanto con el cohete Atlas V -que realizó así su primer lanzamiento para una misión tripulada- como con una pequeña fuga de helio en la nave.
La NASA y Boeing tenían planeada la misión para el pasado 6 de mayo, pero unas dos horas antes del lanzamiento descubrieron una anomalía en un tanque de oxígeno líquido del Atlas V.
Este, sin embargo, no fue el primer aplazamiento. La primera misión tripulada de la Starliner (que en mayo de 2022 cumplió con éxito un viaje sin tripulación a la EEI) debió haber despegado en julio de 2023, pero un mes antes los directivos anunciaron el aplazamiento indefinido del despegue para poder solucionar el sistema de paracaídas de la nave.
De finalizar con éxito la misión, la NASA completará el proceso de certificación hacia fines de este año y, en ese caso, Boeing prevé realizar su primer viaje operacional a la EEI en febrero de 2025.
SpaceX, de Elon Musk, por su parte desde mayo de 2020 ha realizado 13 viajes espaciales tripulados en su cápsula Dragon, incluidos cuatro para clientes comerciales, y doce de los cuales han sido a la EEI. En todos ellos ha transportado a 50 personas, entre astronautas, cosmonautas y ciudadanos privados.