Los trabajadores de Mercedes-Benz en EE.UU. empiezan a votar para unirse al sindicato UAW
La planta de montaje de Mercedes-Benz en Tuscaloosa, Estados Unidos, está en proceso de votación para decidir si se afilia al sindicato United Auto Workers (UAW)
Unos 5,000 trabajadores de la planta de montaje de Mercedes-Benz en Tuscaloosa, la única en Estados Unidos del fabricante alemán, están llamados a votar desde este lunes para aprobar la afiliación del centro de trabajo con el poderoso sindicato United Auto Workers (UAW).
La votación, que se prolongará hasta el 17 de mayo, es la segunda que UAW organiza en las últimas semanas en una planta de montaje de automóviles en el sur de Estados Unidos.
El pasado 19 de abril, los trabajadores de la planta de Volkswagen en Chattanooga, en el estado de Tenessee, votaron unirse a UAW con la aprobación de 2,628 trabajadores (el 73 % de los votos emitidos).
La votación en Chattanooga supuso la primera vez en la historia que los trabajadores de una planta de montaje de automóviles situada en el sur de Estados Unidos -tradicionalmente más hostil a los sindicatos-, y que no pertenece a los tres fabricantes estadounidenses (General Motors, Ford y Stellantis), aprobó unirse a UAW.
La votación en la planta de Mercedes-Benz en Tuscaloosa, en el también estado sureño de Alabama, se produce gracias a que la mayoría de la plantilla de la planta firmó en abril formularios de adhesión al sindicato, paso previo para forzar el reconocimiento por parte de la empresa.
UAW ha denunciado que Mercedes-Benz "está realizando una agresiva campaña" contra la sindicación de la planta y ha presentado varias denuncias con la empresa por "tomar represalias" contra esos trabajadores.
UAW, que durante décadas ha intentado sindicalizar los centros de trabajo de fabricantes extranjeros en el país, ha redoblado sus esfuerzos tras negociar a finales de 2023 contratos colectivos con GM, Ford y Stellantis que incluyen subidas salariales del 25 % en cuatro años además de otros importantes beneficios laborales.