La policía desaloja campamento propalestino en Universidad de Washington
Tensión en la Universidad George Washington
La policía desalojó el miércoles un campamento de manifestantes propalestinos que protestaban desde hace días en la Universidad George Washington, de la capital estadounidense, y realizó varias detenciones, informaron las autoridades.
La policía ingresó al campus poco después de las 04H00 locales (08H00 GMT). Los agentes usaron gas pimienta y arrestaron a un grupo de manifestantes, reportó el periódico universitario GW Hatchet.
Según la cadena CNN, más de 30 personas fueron detenidas.
La operación policial se realizó horas antes de que la alcaldesa Muriel Bowser y la jefa de la policía, Pamela Smith, comparezcan este miércoles ante el Congreso para explicar por qué demoraron tanto en desmantelar el campamento, instalado hace más de una semana.
El departamento de policía declaró en un comunicado que inicialmente había intentado "desescalar las tensiones" sin necesidad de realizar detenciones, pero que constató en base a "incidentes y a informaciones" que, por el contrario, "se estaba incrementando la volatilidad de la protesta".
Las manifestaciones en contra de la guerra en Gaza se multiplicaron en decenas de universidades de Estados Unidos en las últimas semanas, con reclamos de parte de los estudiantes para que los centros de estudio corten sus vínculos, directos o indirectos, con instituciones israelíes y con fabricantes de armas.
La Universidad de Columbia, en Nueva York, corazón de las manifestaciones, decidió cancelar su principal acto de graduación, que estaba previsto para el 15 de mayo, alegando razones de seguridad.
Los estudiantes han criticado lo que consideran como una respuesta de mano dura ante sus protestas.
A la vez, el presidente Joe Biden denunció el martes el "auge feroz" del antisemitismo, en un discurso en el Capitolio en el cual enfatizó que "no hay cabida en ninguna universidad de Estados Unidos, en ningún lugar de Estados Unidos, para el antisemitismo o el discurso de odio o la violencia de cualquier tipo".
El gobierno de Biden trata de mantener un complejo equilibrio entre el respeto a la libertad de expresión y su respuesta ante las quejas por actos intimidatorios contra los judíos.
Los manifestantes aseguran que sus detractores confunden las críticas a Israel con prejuicios contra los judíos.