Representante Grene resuelta a forzar votación por la presidencia de la Cámara
La legisladora republicana Marjorie Taylor Greene de Georgia planea forzar una votación para destituir al presidente de la Cámara de Representantes, Michael Johnson, la próxima semana
La legisladora estadounidense Marjorie Taylor Greene, republicana de Georgia, anunció este viernes que la semana próxima forzará una votación sobre su iniciativa para deponer al presidente de la Cámara de Representantes, el también republicano Michael Johnson.
Los republicanos tienen una mayoría precaria en la cámara baja del Congreso de Estados Unidos, y los dirigentes del Partido Demócrata en ese fuero han indicado que votarán para proteger a Johnson de la sublevación encabezada por Greene.
La republicana hizo su anuncio en el jardín que rodea al Capitolio y junto a afiches con fotografías que muestran a Johnson, de Luisiana, saludando y abrazando al jefe de la minoría demócrata, Hakeem Jeffries, de Nueva York.
"Aquí tenemos a Jeffries y los demócratas, dándole un abrazo afectuoso y un gran beso baboso a Mike Johnson", dijo la representante Greene quien describió a Johnson como "líder del Partido Único".
"Mike Johnson se unió plenamente al repugnante modelo de operación de Washington para financiar las guerras sin fin", afirmó Taylor. "Eso es lo que es. El partido único está dedicado a financiar cada guerra sin fin. Piensan que ése es el modelo de acción que debe usarse".
La ira de Grenne y la de un puñado de representantes en la derecha republicana se intensificó después que, con el apoyo de los demócratas, la Cámara aprobó un paquete de 95.000 millones de dólares en ayuda militar a Ucrania e Israel.
Hace apenas ocho meses el grupo más extremista de la derecha republicana utilizó la regla parlamentaria para deponer al entonces presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, de California, y elevar a Johnson a esa presidencia.
Hasta hoy sólo los representantes Paul Gosar de Arizona, y Thomas Massie, de Kentucky, han apoyado públicamente la iniciativa de Taylor que pone, otra vez, en juego el cargo que ocupa el segundo lugar en la sucesión presidencial de Estados Unidos.
Greene es una leal seguidora del ex presidenteDonald Trump quien, la semana pasada, recibió en Miami a Johnson y luego declaró que el presidente de la Cámara de Representantes estaba haciendo un buen trabajo.