Juez en NY emite orden que prohíbe a Trump comentar sobre testigos, fiscales y jurados
Los fiscales solicitaron dicha orden alegando un historial "comentarios públicos e incendiarios" del expresidente
Un juez de Nueva York emitió el martes una orden mordaza que prohíbe a Donald Trump hacer comentarios públicos sobre testigos, fiscales, personal de la corte y jurados durante el juicio al expresidente por cargos relacionados con pagos destinados a encubrir acusaciones.
El juez Juan M. Merchan citó comentarios anteriores del expresidente sobre él y sobre otros involucrados en el caso, así como la cercanía del inicio del juicio (15 de abril), para lo que denominó una "orden hecha estrechamente a medida" que impide a Trump hacer ciertas declaraciones fuera del tribunal.
"Es incuestionable que la inminencia del riesgo de daño es ahora de primordial importancia", escribió Merchant.
Los fiscales solicitaron dicha orden por el "largo historial de Trump de hacer comentarios públicos e incendiarios" sobre las personas involucradas en sus procesos judiciales.
Esta orden no prohíbe los comentarios acerca de Merchant ni del fiscal de distrito Alvin Bragg, un demócrata electo. Pero sí prohíbe a Trump atacar a figuras clave del caso, como su exabogado convertido en su némesis Michael Cohen, o la estrella porno Stormy Daniels.
La fiscalía declinó hacer comentarios. Se enviaron mensajes al equipo de campaña de Trump para solicitar comentarios.
La orden mordaza se añade a las restricciones establecidas tras la comparecencia de Trump en abril del año pasado, que le prohíben utilizar pruebas del caso para atacar a testigos.
Tras la audiencia del lunes, donde Merchant estableció el 15 de abril como la fecha del juicio, Trump arremetió en redes sociales contra el fiscal Matthew Colangelo, a quien describió como un "radical de izquierda del Departamento de Justicia" enviado a la oficina del fiscal de distrito "para dirigir el juicio contra Trump, y eso fue hecho por Biden y sus matones".
Merchant citó ese comentario en su decisión.
El caso penal de Manhattan se centra en acusaciones de que Trump falsificó registros de su empresa para ocultar la verdadera naturaleza de los pagos hechos a Cohen. El abogado pagó a Daniels 130,000 dólares como parte de un intento, realizado durante la campaña de 2016, de silenciar las acusaciones de que había mantenido encuentros sexuales extramatrimoniales.
Trump enfrenta 34 acusaciones de falsificar registros comerciales, delito punible con hasta 4 años de cárcel, aunque no hay garantía de que una declaración de culpabilidad resulte en una sentencia de prisión.
Trump, el precandidato republicano puntero a la presidencia, ha despotricado repetidamente contra el caso en las redes sociales: advirtió de "posible muerte y destrucción" antes de su acusación el año pasado; publicó una foto en redes sociales de él mismo sosteniendo un bate de béisbol cerca de una fotografía de Bragg, y se quejó de que Merchan es "un juez que odia a Trump" con una familia llena de "odiadores de Trump".
A Trump ya se le había impuesto una orden mordaza similar en su proceso penal en Washington, D.C. por interferencia electoral, y fue multado con 15,000 dólares por violar dos veces una orden mordaza impuesta en su juicio civil de fraude en Nueva York tras realizar una desdeñosa publicación en redes sociales sobre el secretario de la corte en jefe.
En enero, un juez federal de Manhattan amenazó a Trump con expulsarlo del tribunal en un juicio civil sobre las acusaciones de difamación de la escritora E. Jean Carroll en su contra, tras ser oído diciendo, "es una cacería de brujas" y "realmente es una estafa".
El juicio comenzará con la selección del jurado, una tarea que puede ser ardua dada la publicidad que rodea al caso y la impopularidad de Trump en la ampliamente demócrata Manhattan.