Policía de Los Ángeles ejecuta órdenes de registro en caso de audio racista de concejales
Investigación de audio racista en Los Ángeles involucra a empleados de la Federación Laboral
La Policía registró la casa de dos empleados de la Federación Laboral del condado de Los Ángeles como parte de la investigación sobre la grabación y filtración ilegal de un audio en el que se escuchó a tres miembros del Concejo de Los Ángeles y un líder sindical hacer comentarios racistas, informó hoy Los Angeles Times.
La casa del matrimonio Santos León y Karla Vásquez, ambos empleados de la Federación cuando se realizó la grabación, fue registrada a principios de mes y la computadora de León habría sido incautada, según fuentes anónimas citadas por el rotativo.
EL escándalo se desató en octubre pasado cuando el periódico reveló el audio de una reunión de 2021 entre el concejal Kevin de León con la entonces presidenta del Concejo, Nury Martínez, y el entonces presidente de la Federación Laboral del Condado de Los Ángeles, Ron Herrera, y el entonces concejal Gil Cedillo en la que se emitieron epítetos racistas.
Los comentarios más polémicos fueron los de Martínez, quien dijo que el hijo del concejal Mike Bonin, un niño afroamericano, “parece changuito” y también arremetió contra los inmigrantes indígenas mexicanos del estado de Oaxaca, a los que calificó de “feos”.
La ola de protestas que produjeron los comentarios obligó a Martínez y Herrera a renunciar a pocos días de la filtración.
De León se ha mantenido en sus puestos aunque ha habido varios intentos por destituirlo, mientras Cedillo concluyó su término en el Concejo en diciembre pasado.
Una semana después de que estallara el escándalo en octubre pasado, el jefe del Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD), Michel Moore, anunció que se había iniciado una investigación criminal para determinar quién grabó el audio.
La Federación Laboral del Condado de Los Ángeles intentó infructuosamente impedir al diario que publicara detalles del audio, bajo el argumento de que se obtuvieron ilegalmente.
El nombre de León, de 43 años, fue relacionado con la investigación después de que una investigación interna encontrara un programa de sonido en su computadora. El hombre que se desempeñaba como contador fue puesto en licencia.
Por su parte Vásquez, que se desempeñaba como asistente ejecutiva de Herrera, renunció en marzo pasado.
Según la ley de California, las grabaciones ilegales pueden ser consideradas como un delito mayor.
Los cuatro latinos presentes en la reunión han dicho que no sabían que estaban siendo grabados.
Ni León ni Vásquez ni sus abogados han hecho comentarios sobre el caso.