Texas envía migrantes en autobús a Los Ángeles; alcaldesa de LA arremete contra la medida
Un total de 42 personas, incluidos algunos niños, fueron dejadas en Union Station alrededor de las 4 de la tarde, y recibieron atención de parte de las agencias de la ciudad y de organizaciones caritativas
Un grupo de migrantes que llegó en autobús el miércoles al centro de Los Ángeles fue enviado desde Texas, en una medida que la alcaldesa de la ciudad del sur de California calificó como un "ardid repudiable" de parte de un gobernador republicano.
Un total de 42 personas, incluidos algunos niños, fueron dejadas en Union Station alrededor de las 4 de la tarde, y recibieron atención de parte de las agencias de la ciudad y de organizaciones caritativas, informó la oficina del concejal de la ciudad de Los Ángeles Kevin de León.
"Partieron ayer y pasaron 23 horas en el autobús, y no tuvieron oportunidad de comer o tomar agua", dijo Mario Cabrera, de Coalition for Humane Immigrant Rights, quien habló con varios de los migrantes.
"Están siendo alimentados; están siendo trasladados a albergues; están hablando con abogados", comentó. "Estos son migrantes a los que Estados Unidos les permitió entrar al país porque tienen temores creíbles. Aún no reciben asilo".
Muchos de ellos provienen de países latinoamericanos como Honduras y Venezuela, y una persona tenía una cita de inmigración en Nueva York, añadió Cabrera.
La alcaldesa Karen Bass dijo que giró instrucciones a las agencias de la ciudad para que se preparen para recibir a migrantes desde otros estados, luego de que en los últimos meses los gobernadores republicanos comenzaron a enviar a solicitantes de asilo hacia estados demócratas.
"No nos tomaron desprevenidos, ni nos intimidarán", dijo Bass en un comunicado. "Los Ángeles no es una ciudad motivada por el odio o el temor, y sin lugar a dudas no nos dejaremos influenciar o impulsar por políticos mezquinos que juegan con vidas humanas".
El gobernador de Texas, Greg Abbott, dijo que los migrantes fueron enviados a Los Ángeles porque California se ha declarado un "santuario" para los inmigrantes, extendiendo protecciones a personas que viven sin autorización en el país y permitiéndoles solicitar algunos beneficios estatales.
"Nuestras comunidades fronterizas están en el frente de la crisis fronteriza del presidente (Joe) Biden, y Texas seguirá brindando este necesario respiro hasta que él dé un paso al frente para hacer su trabajo y resguarde la frontera", declaró Abbott en un comunicado.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, envió en avión la semana pasada a un grupo de migrantes desde estados fronterizos hacia Sacramento, California, a expensas de los contribuyentes. Hacia finales del año pasado, Florida envió vía aérea a 49 venezolanos a la lujosa isla de Martha's Vineyard, en Massachusetts.
Los migrantes en Los Ángeles recibían asistencia en la iglesia católica croata de San Antonio, cerca del centro.