Alaska: Inundaciones comienzan a disminuir tras tormenta
Varias comunidades reportaron que algunas residencias fueron arrancadas de sus cimientos por la fuerza del agua
Las inundaciones comenzaban a ceder el domingo en algunas partes del oeste de Alaska que fueron azotadas por la peor tormenta en la región en 50 años, dejando atrás escombros esparcidos por el potente oleaje del Mar de Bering hacia las playas y comunidades costeras.
Los remanentes del tifón Merbok se debilitaban el domingo a medida que avanzaban hacia el norte desde el Estrecho de Bering hacia el Mar de Chukchi, en la costa noroccidental de Alaska, donde aún amenazan a comunidades más pequeñas, informó Kaitlyn Lardeo, del Servicio Meteorológico Nacional.
“Este tipo va a permanecer en el Mar de Chukchi algunos días más y luego se debilitará rápidamente porque es muy estacionario”, comentó.
Varias comunidades reportaron que algunas residencias fueron arrancadas de sus cimientos por la fuerza del agua, que a menudo se vio impulsada por ráfagas de viento de hasta 113 kilómetros por hora (70 millas por hora). Una casa en Nome flotó río abajo hasta que quedó atascada bajo un puente.
Se trató de un inmenso sistema de tormentas, suficientemente grande para cubrir Estados Unidos continental desde el Océano Pacífico hasta Nebraska y desde Canadá hasta Texas. Influenció a otros sistemas meteorológicos hasta California, donde una inusual tormenta de finales de verano arrojó lluvias en la parte norte del estado, dándole cierto respiro a los bomberos que combaten incendios forestales, pero a la vez complicando esas labores debido al fango y la tierra suelta.
La marejada de la tormenta causó inundaciones generalizadas y daños a lo largo de 1,609 kilómetros (1,000 millas) de la costa de Alaska, dijo el gobernador Mike Dunleavy.
No se han reportado heridos, muertos ni desaparecidos en el estado, agregó el gobernador durante una conferencia de prensa el domingo. Un niño que había sido reportado como desaparecido el sábado fue localizado más tarde, indicó.
Dunleavy informó que hay caminos dañados y que las autoridades estatales evalúan posibles afectaciones en malecones, sistemas de aguas y aguas residuales, aeropuertos y puertos. Dijo que las comunidades de Hooper Bay, Scammon Bay, Golovin, Newtok y Nome fueron las más afectadas por una combinación de altos niveles del agua, inundaciones, erosión y problemas eléctricos, ya sea en las localidades o en sus aeropuertos.
Personal para el manejo de emergencias y de la Cruz Roja estadounidense se desplegará en esas ciudades a partir del lunes, y se enviarán elementos de la Guardia Nacional de Alaska a Nome, Bethel y Hooper Bay para ayudar a la población. Voluntarios de la Cruz Roja de los 48 estados continentales también evaluarán las necesidades de alimentos, agua y albergue en otros poblados inundados.