EEUU cerrará huecos en el muro fronterizo en Arizona
El Departamento de Seguridad Nacional informó en un comunicado que las labores para completar el proyecto cerca de la Presa Morelos son con el fin de proteger la seguridad de los migrantes
Funcionarios fronterizos recibieron el jueves luz verde para cerrar cuatro aperturas restantes en el muro fronterizo entre Estados Unidos y México cerca de la localidad de Yuma, Arizona.
El Departamento de Seguridad Nacional informó en un comunicado que las labores para completar el proyecto cerca de la Presa Morelos son con el fin de proteger la seguridad de los migrantes y de sus propios agentes. Algunas personas que cruzan la frontera por la zona han muerto o resultado heridas después de caer por una pendiente o ahogándose al caminar a través de un sector poco profundo del río Colorado.
Una niña migrante de cinco años de edad que cruzaba por el agua junto a un grupo se ahogó cerca de la presa el 6 de junio, cuando se separó de su madre. Su cuerpo fue encontrado posteriormente en el río.
Las autoridades federales no dieron a conocer la identidad o la nacionalidad de la víctima. Pero periódicos jamaicanos han dicho que se cree que era originaria de ese país.
Yuma es una popular zona para el cruce de migrantes, en parte porque pueden caminar fácilmente a través del río, entregarse a los agentes fronterizos y pedir asilo.
“Debido a la proximidad con la Presa Morelos y la fuerte corriente del río Colorado, esta zona presenta riesgos de seguridad y para la vida de los migrantes que intentan cruzar hacia Estados Unidos”, señaló el comunicado en el que se anunció que el secretario de Seguridad Nacional Alejandro N. Mayorkas había aprobado las obras de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP por sus iniciales en inglés). También resaltó los peligros para sus propios agentes.
El ambientalista de Arizona Myles Traphagen, quien ha estado realizando un mapeo del daño ecológico por la construcción del muro fronterizo durante el gobierno del expresidente Donald Trump, dijo que el cierre de brechas no será un gran disuasivo para los migrantes.
Traphagen dijo que la zona de Yuma se “ha convertido en la nueva Isla Ellis para Arizona, a donde llegan personas de lugares como Etiopía, Cuba, Rusia, Ucrania, India, Colombia y Nicaragua.
“Hay personas que atraviesan medio mundo en avión, trenes y automóviles”, señaló, “así que es tremendo error esperar que el cierre de cuatro pequeñas aperturas los hará dar la media vuelta y reservar un vuelo de regreso en Air Ethiopia”.
De momento se desconoce cuándo comenzaría la obra. El comunicado dice que los funcionarios actuarán “de la forma más expedita posible, al tiempo que mantienen la protección ambiental” mediante consultas a las partes afectadas.
Las aperturas se encuentran dentro de una zona para un proyecto de barreras previamente financiado por el Departamento de Defensa y será costeado con las asignaciones para el Departamento de Seguridad Nacional para el año fiscal 2021.
El senador federal demócrata por Arizona Mark Kelly ha estado presionando al gobierno del presidente Joe Biden para cerrar las aperturas cerca de la presa por cuestiones de seguridad. La obra también cuenta con el respaldo de funcionarios locales, entre ellos el alcalde de Yuma, el republicano Douglas Nicholls.
Ante la presión por cerrar estas aperturas, ambientalistas como Traphagen han solicitado que se retiren otras secciones de la barrera que aseguran han perjudicado a la fauna local, como linces, pumas, jabalíes y venados.
Wildlands Network, una organización con sede en Tucson, difundió esta semana un nuevo reporte sobre lugares a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México que considera requieren de la mayor restauración ambiental.
Traphagen, el coordinador del programa de tierras fronterizas del grupo, recorrió los límites internacionales a través de Nuevo México, Arizona y California durante el último año para identificar los corredores de vida silvestre dañados y otros perjuicios al medio ambiente.
El grupo pide la replantación de vegetación nativa en zonas que quedaron completamente desmontadas durante la construcción del muro, así como ampliar los espacios entre los pilotes de acero, una brecha que actualmente es de 10 centímetros (4 pulgadas), para permitir el tránsito de más animales silvestres.
También pide el retiro de 290 kilómetros (180 millas) de alambre de púas instalado a lo largo de los bolardos en todos los estados fronterizos entre 2019 y 2020, tanto por motivos estéticos como por razones de seguridad para las personas y los animales silvestres.