Compartir
Secciones
Podcasts
Última Hora
Edición RD
Servicios
Plaza Libre
Efemérides
Cumpleaños
RSS
Horóscopos
Crucigrama
Más
Contáctanos
Sobre Diario Libre
Aviso Legal
Versión Impresa
versión impresa
Redes Sociales
Actualidad

Al aire libre: Peatones reclaman las calles de NY tras el COVID

La pandemia del coronavirus podría haber dejado una huella duradera en la forma en que la ciudad usa sus calles: más espacio para las personas y menos espacio para los automóviles

Expandir imagen
Al aire libre: Peatones reclaman las calles de NY tras el COVID
Comensales de un restaurante que ofrece servicio al aire libre como parte de las medidas contra el COVID-19, en Nueva York, el domingo 13 de diciembre de 2020. (FOTO AP/TED SHAFFREY, ARCHIVO)

Mientras el COVID-19 arrasaba por la ciudad de Nueva York, los habitantes preocupados salieron a las calles, aceras y parques a realizar las actividades que ya no podían hacer en espacios cerrados por temor al coronavirus. Cenaban con amigos en cobertizos al aire libre que construyeron apresuradamente los restaurantes, y asistieron a clases de salud, conciertos e incluso sesiones de terapia en calles cerradas al tráfico.

Ahora que la ciudad continúa su camino hacia la normalidad, la pandemia podría haber dejado una huella duradera en la forma en que la ciudad usa sus calles: más espacio para las personas y menos espacio para los automóviles.

A pesar de que ya no se piden mascarillas ni comprobantes de vacunación para los espacios cerrados de los restaurantes, las terrazas para cenar al aire libre, instaladas en antiguos carriles de estacionamiento, nunca han sido más abundantes.

Mientras tanto, la ciudad está ampliando su programa Calles Abiertas, que cierra las vías a los vehículos y las abre a los peatones.

La expansión del programa, originalmente concebido como una forma de dar a los neoyorquinos más espacio para hacer ejercicio, tiene en parte la intención de aumentar el tráfico peatonal en los corredores comerciales y brindar oportunidades a los vecindarios de bajos ingresos.

“Hubo muchos cierres de cosas durante el COVID. Hay secciones de calles donde hay montones y montones de escaparates vacíos, y eso es deprimente”, dijo Maura Harway, que vive en el Upper West Side de Manhattan.

Durante años, algunos líderes de la ciudad han buscado “reinventar y reutilizar el uso de nuestras calles”, dijo el comisionado de transporte de la ciudad, Ydanis Rodríguez, quien quiere más paseos en los vecindarios para reuniones al aire libre.

Ese replanteamiento comenzó antes de la pandemia. Hace dos décadas, el entonces alcalde Michael Bloomberg supervisó una gran expansión de los carriles para bicicletas y permitió que se instalaran estaciones de alquiler de bicicletas en las calles de la ciudad. Defendió las plazas peatonales como las de Herald Square y Times Square para mantener los automóviles fuera de los corredores peatonales. Y su administración amplió las vías verdes y los parques frente al mar, especialmente en Manhattan y Brooklyn.

Bill de Blasio siguió el ejemplo de su predecesor e implementó más medidas para controlar y reducir la velocidad del tráfico vehicular. También impulsó, como Bloomberg, un sistema que cobraría peajes para conducir en una gran franja de Manhattan.

Por su parte, el actual alcalde, Eric Adams, se ha comprometido a seguir “recuperando espacio para los peatones”.

TEMAS -

Noticias y servicios que extienden el alcance global de la cobertura basada en hechos