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Un diamante de sangre entretenido y punzante

Hurga en los conflictos que aquejan a los africanos

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Un diamante de sangre entretenido y punzante
Escena de "Blood diamond", protagonizada por Leonardo Dicaprio.
Santo Domingo. En los inicios del arte cinematográfico se desarrolló un sistema de producción, promoción y publicidad basado en las actrices de mayor aceptación. Le llamaron 'star system' y fue la clave comercial del cine mudo. En las décadas del 10 al 30 del siglo pasado, la producción cinematográfica se movía principalmente en torno a figuras femeninas que llenaban la pantalla con sus gestos ampulosos de damas en apuros o bien de 'femmes' fatales. Eran mujeres de poder, como diría un amigo, cuyos ojos podían transmitir sentimientos, ansiedades y deseos de forma más elocuente que con la palabra.

La llegada del cine sonoro significó para las divas de la pantalla silente, como Gloria Swanson, Theda Bara y Mary Pickford, un rápido paso al olvido.

Sin embargo, la estructura comercial de los grandes estudios ha reflotado sutilmente el mismo concepto, pero ahora con mayor amplitud. Las superproducciones de hoy son escritas para determinados actores y actrices; la publicidad y promoción en torno a ellos es parte medular de la estrategia para vender no sólo taquillas, también revistas, programas de televisión y websites que se encargan de hacernos saber la más mínima y muchas veces nimia novedad acerca de las celebridades del cine.

Di Caprio: un diamante pulido

Dentro de este mundo de celebridades destacan algunos por su indiscutible talento. Uno de ellos es el actor Leonardo Di Caprio, quien despliega todo su arsenal dramático en "Diamante de sangre", filme que mezcla la acción y la denuncia acerca del tráfico de piedras preciosas en territorio africano.

Tiene este actor –nacido precisamente en Hollywood- no sólo talento para desenvolverse frente a la cámara, lo tiene también para elegir guiones cuyo argumento signifique un desafío real a sus capacidades histriónicas. Es de aquellos que se impregnan totalmente de su personaje y el espectador difícilmente duda de que está viendo al personaje y no al actor. Se dirá que ello es lo elemental de la actuación, pero en el cine de hoy en día es difícil encontrarlo. Al pasar revista a su extensa filmografía, advertimos que sus tempranas incursiones ya tenían densidad y profundidad dramática. Como discapacitado en "¿A quién ama Gilbert Grapes?" (1993) o interpretando al poeta francés Arthur Rimbaud en "Eclipse total" (1995), demostró una amplitud de registro notable que le llevó a proyectos más ambiciosos. Para el gran público Leonardo Di Caprio es el galán de "Titanic" (1997), pero sus actuaciones como irlandés vengativo en "Armas de Nueva York" (2002) o como obseso millonario en "El aviador" (2004), están entre las destacables de las últimas décadas.

Así es África

Dirigida por el también productor Edgard Zwick ("El último samurai", 2003), es una película intensa que se adentra en los conflictos tribales y raciales del continente africano e intenta además una definición, que a la par conlleva una explicación a la situación política, social y económica de esa parte del mundo. A.E.A., sigla que significa Así es África, explica las razones de la codicia y la traición, que van de la mano en una tierra maldita enrojecida por la sangre de los caídos.

El personaje Danny Archer, interpretado por Di Caprio, es un ex mercenario dedicado al contrabando de armas a cambio de diamantes. Como en los buenos guiones, Archer tendrá la oportunidad de redimirse al ayudar a un pescador y a su familia. Excelente es la dinámica creada por los protagonistas, donde luce también el actor africano Djimon Hounsou como Solomon Bo, padre de familia que esclavizado por un grupo revolucionario encuentra un diamante excepcional, eje del conflicto narrativo.

Recomendable para quienes gustan de la acción y quieran conocer un poco más del llamado continente negro y ver a un dúo de buenos actores desplegar sus mejores herramientas en un relato largo, entretenido y punzante a la vez.

Blood diamond

Estados Unidos, 2006. 143 minutos.

Dirección: Edward Zwick

Guión: Charles Leavitt

Música: James Newton Howard

Fotografía: Eduardo Serra

Intérpretes :

Leonardo DiCaprio

Djimon Hounsou

Jennifer Connelly

Kagiso Kuypers

Benu Mabhena

Anointing Lukola

Antony Coleman

Arnold Vosloo

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