Un Fito Páez con su piano y conversador en el Teatro Nacional
El rockero argentino trajo este viernes a suelo dominicano la nostalgia, el amor y el desamor en un concierto de hora y media
Luego de tres años, el rockero argentino Fito Páez se reencontró con el público dominicano este viernes 6 de agosto en la sala Carlos Piantini del Teatro Nacional Eduardo Brito, con su gira “Fito Páez, un hombre con piano”.
Íntimo, conversador, a piano y voz, el muchas veces irreverente cantante, compositor y trovador encantó a los asistentes con títulos como “Ciudad de pobres corazones", "Brillante sobre el mic", “La canción de las bestias”.
Desde aquí parte hacia Puerto Rico donde tendrá un concierto en el Centro de Bellas Artes.
Fito Páez y su piano, una noche con sus éxitos
Detalles del recital; comenzó a las 8:00 de la noche
Luego de una hora de retraso (estaba pautado a las 7:00 p.m. según las boletas) y ya con un aforo impaciente que empezaba a aplaudir exigiendo el comienzo de la función, algo no muy común en el Teatro Nacional, justo a las 8:03 p.m. subió el telón y el argentino apareció en escena, tocando el piano y cantando.
La luz tenue se enfocaba en Fito y su piano al compás de “La conquista del espacio” (álbum, 2018) en Fa Mayor, y una audiencia se ignoró lo anterior y disfrutó de principio a fin.
"Buenas noches, Santo Domingo", dijo para romper el hielo, y el público le respondió con gritos y aplausos.
El compositor tenía escondido entre una especie de bufanda un cuello ortopédico y bromeó sobre eso toda la noche.
“Si mi cabeza se va para atrás será una escena única que solo ustedes podrán ver”, soltó con un poco de humor negro.
Siguió con “La rueda mágica”, “Eso te llevas de mí” y Nocturno al sol” dejando a los asistentes cantar".
A Fito la pandemia le hizo compartir muchas anécdotas. Expresó que los “encerraron” para referirse a la cuarentena en su país desde el 20 de marzo y él, inquieto al fin, no podía quedarse de brazos cruzados. Así que contó que terminó tres álbumes en el confinamiento.
"Rock and Roll Revolution" marcó una de las interpretaciones más movidas.
Otra fue “El mundo cabe en una canción” en Sol Mayor.
Luego cantó una canción del 2020 Bob Dylan en inglés, que fue una de las favoritas en pandemia.
Se trató de “I contain multitudes”, un poema.
Siempre cercano al público, entre canción y otra, alguien le pidió una y le respondió: “Esa va después” con su marcado acento.
“Tumbas de la gloria” en Fa Mayor y “Al lado del camino”, en “La Mayor” y “El muro de los lamentos” (1992) en Mi menor continuaron demostrando su complicidad con el piano.
Casi 20 canciones fueron interpretadas. A una hora del show hizo un popurrí de “Alegría”, “Piluso”, “She’s mine”, “Cable a tierra”, y “El amor después del amor” cuyas letras viajaron del amor, el desamor, la nostalgia y la cotidianidad de “Una puta ciudad”, tal cual uno de sus versos.
El público a sus pies
“Buenas noches, Santo Domingo. Un hombre un piano y un cuello ortopédico”, dijo Fito para salir del escenario, insinuando que se iba. Nadie se paró. Pasaron las 9:20 de la noche y le pedían otra.
Un éxtasis se apoderó de la sala, pues los que fueron a verlo empezaron a aplaudir exigiendo su regreso; querían escuchar otros éxitos, y como su figura no se asomaba, ellos comenzaron a cantar.
Como parte de la estrategia de muchos artistas casi despidiéndose, Fito regresó, despojado de su chaqueta y en señal de que estaba relajado.
Les hizo reverencia a sus fanáticos, que lo recibieron con ovación de nuevo para luego cantarles a capella “Yo vengo a ofrecer mi corazón”, uno de sus clásicos de la década de los 80.
Finalizó con "Dar es dar" (1996) y Mariposa Tecknicolor" (1994), la que pedían a gritos y que fue cantada a coro y entre aplausos.
No hay dudas de que el público tiene deseo de disfrutar de manera presencial diferentes propuestas.
El concierto fue producido por César Suárez Jr.
Fito Páez es también autor de varios libros y se ha ganado ocho Grammy Latino y el Premio a la Excelencia de la Academia Latina de la Grabación. Realizó varios conciertos a través de plataformas virtuales en medio de la pandemia, pero quería revivir la experiencia que el contacto de los escenarios brinda.
El rockero se encuentra promoviendo el biopic sobre su vida, que estrenará este año la plataforma Netflix y recibió recientemente su primer Grammy anglosajón por su álbum más reciente denominado “La conquista del espacio”.