Giorgio Armani: lo que pasará con el emporio cuando el diseñador no esté
A sus 89 años, el diseñador italiano ha decidido dejar por escrito todo lo que debe suceder para mantener viva su marca tras su muerte o su retiro
El diseñador Giorgio Armani es consciente de que más allá de una firma de moda ha creado todo un imperio que se ha convertido en referente de la moda de lujo. Es por eso que a sus 89 años ha decidido dejar por escrito todo lo que debe suceder para mantener viva su marca tras su muerte o su retiro.
De acuerdo con Forbes, la fortuna del modisto italiano está cifrada entre los 11,200 millones de dólares. Esto lo convierte en el segundo hombre más rico de Italia, solo por detrás de Giovanni Ferrero, dueño de Nutella. Como Armani no tuvo hijos, muchos se preguntan quién heredará su fortuna y empresa.
Los familiares más cercanos son sus sobrinas Silvana y Roberta, hijas de su hermano Sergio, fallecido hace años, y Andrea Camerana, hijo de su hermana Rosanna. Como no existe la legítima, tiene plena libertad para decidir, reseña el portal República.com.
El diseñador descartó la posibilidad de vender su emporio a un grupo extranjero en una entrevista concedida a Financial Times el mes pasado. "¿Sin mí? No pienso que todo esto se pueda replicar. Sé que la empresa Giorgio Armani se identifica conmigo y por tanto es mi responsabilidad asegurarme de que lo que continuará después de mí tendrá un carácter que se parecerá al señor Armani", sostuvo.
Un documento reservado para el momento de la sucesión, filtrado por Il Corriere della Sera, establece la estructura empresarial en la que encajará su legado. En primer lugar, se abrirá la puerta a la cotización en Bolsa e incluye seis categorías de accionistas, diferenciados por su poder de decisión dentro de la empresa.
Los accionistas se diferencian por las letras de la A a la F y otros dos grupos para los accionistas que no tendrán derecho a voto. Los socios A tendrán el 30 % del capital, los socios F el 10 % y los demás, el 15 % cada uno. Cada acción A dará derecho a 1.33 votos y cada acción F a 3 votos.
Los accionistas A tienen derecho a nombrar tres consejeros, entre los cuales se elegirá el presidente. Los F designarán a otros dos, entre los que se incluirá el administrador delegado.
De acuerdo con el documento, Armani establece que bastará la mayoría absoluta de los presentes en el Consejo de Administración para aprobar el presupuesto. Cuando se trate de acordar fusiones, escisiones, modificaciones del estatuto y aumentos de capital necesitarán el 75 % de los votos a favor en una asamblea extraordinaria.
En la elección de los responsables de la línea de hombre y mujer se involucrarán las seis categorías de accionistas. Sin embargo, solo los A y los F tendrán poder de veto. Para establecer los salarios, deberá aprobarlo al menos el 51 %. De lo contrario, los directores no recibirán ninguna remuneración, indica el documento publicado por Il Corriere della Sera.