Padre de Meghan Markle apoya a la familia real británica tras las declaraciones de su hija
La duquesa de Sussex no mantiene contacto con su padre después de que este hablase con la prensa sensacionalista antes de la boda de la pareja
Thomas Markle, padre de la duquesa de Sussex, admitió este martes en el programa de televisión Good Morning Britain sentirse “decepcionado” tras ver la entrevista que su hija concedió a la presentadora estadounidense Oprah Winfrey y negó que la familia real sea racista.
La duquesa de Sussex no mantiene contacto con su padre después de que este hablase con la prensa sensacionalista antes de la boda de la pareja, celebrada en el castillo de Windsor en 2018.
“Tengo un gran respeto por los royals y no creo para nada que la familia real sea racista. No creo que los británicos sean racistas. Creo que Los Ángeles es racista. California es racista, pero no creo que los británicos lo sean”, insistió Thomas Markle en declaraciones a la cadena ITV. El padre, además, expresó su decepción por todo el escándalo y agregó: “He pedido disculpas por todo lo que pasó al menos cien veces”.
“Si no sé nada de ellos en 30 días, entonces haré otro relato a la prensa. Cuando se decidan a hablar conmigo, dejaré de hablar con la prensa”, añadió el padre. “No obstante, quiero mucho a mi hija. De haber sabido que tenía problemas psicológicos, la hubiera apoyado”, agregó.
La prensa pide identificar al miembro de la familia real que, al parecer, manifestó la inquietud sobre el color de la piel del hijo de los duques de Sussex, Archie, antes de que naciera en 2019. Sin embargo, tanto Harry como Meghan se negaron a desvelar quién había hecho tales comentarios, pero Oprah aclaró que no habían sido ni la reina Isabel II ni el príncipe Felipe.
En la entrevista, la duquesa de Sussex reveló que, tras su boda en mayo de 2018, se sintió atrapada en la monarquía, al tener restringidos los movimientos o lo que podía decir en público, hasta el punto de que llegó a tener pensamientos suicidas. Esta situación llevó hace un año a los duques a apartarse de la familia real para fijar su residencia en Estados Unidos.