¿Por qué Raquel Peña usó una mantilla negra para ver al papa Francisco?
Protocolo recomienda una vestimenta sobria, elegante y discreta
Vestida de negro, con un rosario en sus manos, escasas joyas y una mantilla negra visitó este viernes la vicepresidenta de la República, Raquel Peña, al sumo pontífice de la Iglesia Católica, papa Francisco.
El vestuario de la vicepresidenta se corresponde con el protocolo "SED": sobrio, elegante y discreto que se requiere para visitar al papa. Su mantilla negra, una prenda poco usual en el Caribe, tiene una razón de ser: “se usa para cubrir la cabeza en señal de respeto”.
Para asistir a los actos religiosos de la Santa Sede y aún más, ver al papa, las personas interesadas deben cumplir con ciertos requerimientos en su vestimenta.
Las mujeres deben vestir formal en negro, falda por debajo de la rodilla y mangas largas. Los vestidos blancos están reservados para las reinas católicas y consortes de monarcas católicos. Es conveniente cuidar que los tacones sean bajos y evitar el uso de accesorios vistosos o exceso de maquillaje.
El uso de mantilla es recomendable, pero quizás es más típica entre las españolas y belgas que entre las demás señoras. De utilizarse debe ser de color negro. Solo las que tienen el llamado privilegio del blanco pueden utilizar una mantilla blanca.
De acuerdo al portal Protocolo, las mujeres deben evitar los hombros descubiertos, los escotes pronunciados y las espaldas al aire.
En cuanto a los accesorios, los zapatos –negros si se va de negro– deben tener un tacón discreto. Se puede llevar un pequeño bolso, un rosario o guantes negros en las manos. Las joyas vistosas es mejor olvidarlas al igual que algún peinado o maquillaje muy marcado.
No se aconseja vestir de colores rojos, malvas y morados, ya que se trata de los tonos que utilizan cardenales y obispos.
Para los hombres hay pocas normas: solo deben vestir con traje oscuro y corbatas en tonos sobrios.
Cuando la audiencia es en un lugar abierto se permite el uso de sombreros, tanto a los hombres como a las mujeres. Igualmente, el calzado de ambos debe ser cerrado.
Otras visitas al papa Francisco
A otras mujeres de la política y la realeza les ha tocado audiencia con el sumo pontífice, donde se puede apreciar la puesta en ejecución del protocolo antes descrito.
A la reina Isabel II de Inglaterra no se le exige el cumplimiento del protocolo. Al ser la gobernadora suprema de la cabeza de la Iglesia Anglicana - el arzobispo de Canterbury es el primado de la Iglesia de Inglaterra y líder espiritual de la Comunión anglicana - Isabel II se ha reunido con el papa Francisco vestida de color violeta y con sombrero a juego.
La vicepresidenta de la República, Raquel Peña, le solicitó al papa Francisco unirse en oración por la salud y el bienestar de todo el pueblo dominicano, la paz mundial y el cese de conflictos que afectan la humanidad, de acuerdo a una nota de prensa divulgada por la Presidencia.
Durante el encuentro con el líder de la Iglesia católica, la vicemandataria trató temas relacionados al compromiso que tiene la humanidad de cuidar la casa de todos que es la tierra, con el buen manejo de los recursos naturales y la preservación del medioambiente.
De la misma manera, pidió al Papa Francisco unirse a la petición del presidente Luis Abinader, de que la comunidad internacional acuda al llamado de asistencia y ayudas al pueblo haitiano.
A su llegada a la ciudad del Vaticano, Peña fue recibida por 105 gentiles hombres de la Cortile di San Dámaso (Patio de San Dámaso), y la Guardia Suiza Pontificia, protocolo utilizado para el recibimiento de dirigentes de alto nivel.
Peña agradeció al papa Francisco, por la distinción de recibirla y conversar sobre el papel de la diplomacia eclesiástica para garantizar la convivencia mundial en momentos tan difíciles como una guerra.
La vicemandataria saldrá de Roma en un vuelo comercial a las 12:30 p.m. de este viernes y regresará al país la madrugada del sábado 25 de junio por el Aeropuerto Internacional de las Américas José Francisco Peña Gómez.
Con información de Protocolo, El Debate.