Si quieres ser libre, construye tu independencia
Podemos vivir siendo independientes de la cultura del cheque (por llamar de alguna forma al día del cobro) y hasta podemos construir nuestra libertad financiera total. La clave está en la palabra construir...
En el mes de la independencia dominicana me suelo preguntar por qué no aprendemos de la importancia de ser libres, por ejemplo, en lo financiero.
La independencia financiera nos enseña su importancia desde muy temprano en la vida. Podernos comprar un dulce de niños era una gran ventaja... algunos dependían de si sus padres les querían dar el dinero para dicha adquisición. Que me dieran una mesada me hizo libre para elegir, por lo menos eso.
A muchos, la mesada les duraba poco. Otros, no recibían este interesante medio, pedían para cada adquisición. No aprendieron a administrarse desde pequeños, mucho menos lo que era la independencia.
Podemos vivir siendo independientes de la cultura del cheque (por llamar de alguna forma al día del cobro) y hasta podemos construir nuestra libertad financiera total. La clave está en la palabra construir... retomo esa idea en un instante.
Cuando sabemos administrarnos sentimos la libertad de poder adquirir lo que deseamos; abro paréntesis: siempre que deseemos lo que realmente podemos adquirir... lo que llamo vivir en abundancia; cierro paréntesis.
La independencia que tenemos es la de poder elegir en qué usaré mi dinero. Nadie me obliga, aunque sí me incentivan. La sociedad, los amigos, la familia y demás, pueden pensar que debo usar mi dinero de una forma, pero mi independencia la ejerzo cuando sé cómo usarlo para sacarle el mayor provecho a cada centavo.
Por suerte, los que están en contra de esta forma de ver la vida no llegan a este punto de mi escrito, ahora estoy con los que sí quieren tener independencia dando pasos para lograrla.
La independencia total llega cuando no tengo que trabajar para recibir el dinero que necesito para vivir. Se obtiene de lo que llamamos ingresos pasivos y semi pasivos. Un apartamento alquilado, una participación en acciones o ETF, son algunos ejemplos.
La mala noticia para algunos que no saben de esto es que para lograrlo hay que tener dinero... ¿Lo tienes? Pues no es mala noticia para ti.
¿De dónde sale ese dinero de la independencia total? De pequeños pedacitos que guardamos e invertimos de cada cheque que recibimos. Al que piensa que no da para guardar le tengo una horrible noticia, nunca serás independiente, y cuando llegues al momento de quererte retirar o que te retiren, serás un esclavo sin solución.
Jugarás a la lotería cada semana para ver si Dios se apiada... pero él te ha dado una vida completa para guardar para cuando no quieras o puedas trabajar. Te ha dado el poder de elegir en qué gastar. Te ha dado hasta la cabeza para que puedas meterle conocimiento de utilidad y lo vendas para conseguir más dinero... pedirle los números de la lotería no creo que sea lo más asertivo.
Apasionarse con ser independiente es lo más sensato, si queremos construir la libertad total, la que debemos disfrutar lo antes posible.