Carlos Alfredo Fatule: la vida, una satisfacción sencilla
El cantante, actor, poeta y productor se confiesa
Santo Domingo. Carlos Alfredo Fatule comenzó su vida artística -dice él que "informalmente"- en 1983, cuando ganó un Festival de la Voz y la Canción en Puerto Rico. Al año siguiente se inició en la televisión "en serio" como cantante baladista, en Teleantillas.
Fue Milton Peláez quien lo llevó a "Sabroshow" y comenzó a prepararlo como "show man". Había venido de La Romana, su ciudad natal, donde había recibido clases de canto, solfeo y piano desde los 7 años de edad. Allí había tenido sus propias agrupaciones musicales, desde grupo de rock, hasta orquesta merenguera. A los 16 años "picoteaba" bastante en el pueblo con su grupo "Somos nosotros". Se confiesa que fue ganado primero por el rock y después por el merengue del Conjunto Quisqueya. En medio de las actuaciones había momentos en los que Fatule cantaba boleros o baladas.
Estudió medicina, especialidad que no concluyó y le hubiese gustado ser cirujano plástico. De hecho, durante un par de años fue ayudante de cirugía e instrumentista en la Clínica Gómez Patiño.
Los estudiantes de medicina se juntaban a cantar, y en una de esas ocasiones hizo un show completo y un amigo le invitó a que fuera al X Festival de la Canción y la Voz de Puerto Rico; allí ganó el tercer lugar como intérprete y la canción, compuesta por Félix Manuel Hermida, ganó el primer lugar.
De todos modos, Fatule no quería dejar su medicina y no quería ni siquiera escuchar a los de la televisión que se le acercaban con propuestas, hasta que Aquiles Durán le mandó un buen día un recado a su casa, para que fuera un lunes a Teleantillas. Corría el 1984, el salario mínimo era de 60 pesos y el dólar estaba a 2 por 1. Cuando vio que por cantar dos canciones cada fin de semana se podía ganar 100 pesos, o sea, 400 al mes. Allí mismo se acabaron las reticencias.
[b]Merengue con ópera[/b]
Ha llovido algo desde entonces, tanto que tiene dos hijas adolescentes, un matrimonio recién terminado y una vida que comienza de nuevo. En ese mismo tren de inauguraciones, el domingo pasado fue la premier de su nueva producción de televisión "VIP".
Bienvenido Miranda y Liliana Diaz le dieron la oportunidad de probarse como actor, en "Seis despistados en busca del amor", su primera aparición en la Sala Ravelo del Teatro Nacional.
Luego tuvo un papel principal en la zarzuela de Ernesto Lecuona "El cafetal", donde hizo el papel de El niño Alberto.
Fatule se reconoce como un tenor ligero con buen registro. Ama la ópera y de estas algunas como "Por mon homme", de "La hija del regimiento", "La Boheme", "Questo cuella" y varias canciones napolitanas famosas.
Luego hizo "El merengue con ópera", un número que pegó en muchos otros países, otra vez gracias a Milton Peláez, quien dirige el show "Todo en uno" que actualmente presenta en el Bar del Teatro Nacional los lunes a las 10:00 de la noche. Su papel en "Jesucristo Superstar" fue memorable.
Fatule mantiene su programa de televisión "Gózalo" y dice que ahora apuesta como productor de "VIP" los domingos de 7:00 a 8:00 de la noche.
"A medida que me han ido cayendo estos pocos años, han ido variando muchos los gustos. El ímpetu va cambiando y vas adquiriendo un especial gusto por la calidad, en vez de la cantidad. Ya cada día se hace mucho más sencilla la necesidad de satisfacción, pero con mucho más calidad", confesó a DL.
"A mí lo que más me llena en el arte quizás es cantar, pero lo que más me gusta es estar tranquilo, casi de manera solitaria, con una buena compañía, con la satisfacción de que los que dependen de mí estén bien, contentos, felices y que sepan a dónde van", expresó con toda la experiencia de sus 43 años.
[b]Su filosofía de la vida[/b]
Carlos Alfredo Fatule fue estudiante de medicina, de la cual le gusta la especialidad de cirugía estética. Abandonó sus estudios por el arte, cuando descubrió que por cantar dos canciones un fin de semana podía ganar mucho dinero.
Es dueño de una filosofía de la vida según la cual cada día está mejor; nunca dice "estoy bien", sino "estoy mejor". Para él uno siempre está mejor el día de hoy que el día de ayer. Cada día pretende ser un artista mejor, un ser humano mejor, un padre mejor, un amigo mejor, un trabajador mejor. Actualmente mantiene su programa de televisión "Gózalo", acaba de sacar al aire como productor el programa "VIP" y se presenta cada lunes a las 10:00 de la noche en el Bar del Teatro Nacional con el show "Todo en uno", dirigido por Milton Peláez, que fuera quien lo llevara a "Sabroshow", su debut en la escena de la Capital.
Fue Milton Peláez quien lo llevó a "Sabroshow" y comenzó a prepararlo como "show man". Había venido de La Romana, su ciudad natal, donde había recibido clases de canto, solfeo y piano desde los 7 años de edad. Allí había tenido sus propias agrupaciones musicales, desde grupo de rock, hasta orquesta merenguera. A los 16 años "picoteaba" bastante en el pueblo con su grupo "Somos nosotros". Se confiesa que fue ganado primero por el rock y después por el merengue del Conjunto Quisqueya. En medio de las actuaciones había momentos en los que Fatule cantaba boleros o baladas.
Estudió medicina, especialidad que no concluyó y le hubiese gustado ser cirujano plástico. De hecho, durante un par de años fue ayudante de cirugía e instrumentista en la Clínica Gómez Patiño.
Los estudiantes de medicina se juntaban a cantar, y en una de esas ocasiones hizo un show completo y un amigo le invitó a que fuera al X Festival de la Canción y la Voz de Puerto Rico; allí ganó el tercer lugar como intérprete y la canción, compuesta por Félix Manuel Hermida, ganó el primer lugar.
De todos modos, Fatule no quería dejar su medicina y no quería ni siquiera escuchar a los de la televisión que se le acercaban con propuestas, hasta que Aquiles Durán le mandó un buen día un recado a su casa, para que fuera un lunes a Teleantillas. Corría el 1984, el salario mínimo era de 60 pesos y el dólar estaba a 2 por 1. Cuando vio que por cantar dos canciones cada fin de semana se podía ganar 100 pesos, o sea, 400 al mes. Allí mismo se acabaron las reticencias.
[b]Merengue con ópera[/b]
Ha llovido algo desde entonces, tanto que tiene dos hijas adolescentes, un matrimonio recién terminado y una vida que comienza de nuevo. En ese mismo tren de inauguraciones, el domingo pasado fue la premier de su nueva producción de televisión "VIP".
Bienvenido Miranda y Liliana Diaz le dieron la oportunidad de probarse como actor, en "Seis despistados en busca del amor", su primera aparición en la Sala Ravelo del Teatro Nacional.
Luego tuvo un papel principal en la zarzuela de Ernesto Lecuona "El cafetal", donde hizo el papel de El niño Alberto.
Fatule se reconoce como un tenor ligero con buen registro. Ama la ópera y de estas algunas como "Por mon homme", de "La hija del regimiento", "La Boheme", "Questo cuella" y varias canciones napolitanas famosas.
Luego hizo "El merengue con ópera", un número que pegó en muchos otros países, otra vez gracias a Milton Peláez, quien dirige el show "Todo en uno" que actualmente presenta en el Bar del Teatro Nacional los lunes a las 10:00 de la noche. Su papel en "Jesucristo Superstar" fue memorable.
Fatule mantiene su programa de televisión "Gózalo" y dice que ahora apuesta como productor de "VIP" los domingos de 7:00 a 8:00 de la noche.
"A medida que me han ido cayendo estos pocos años, han ido variando muchos los gustos. El ímpetu va cambiando y vas adquiriendo un especial gusto por la calidad, en vez de la cantidad. Ya cada día se hace mucho más sencilla la necesidad de satisfacción, pero con mucho más calidad", confesó a DL.
"A mí lo que más me llena en el arte quizás es cantar, pero lo que más me gusta es estar tranquilo, casi de manera solitaria, con una buena compañía, con la satisfacción de que los que dependen de mí estén bien, contentos, felices y que sepan a dónde van", expresó con toda la experiencia de sus 43 años.
[b]Su filosofía de la vida[/b]
Carlos Alfredo Fatule fue estudiante de medicina, de la cual le gusta la especialidad de cirugía estética. Abandonó sus estudios por el arte, cuando descubrió que por cantar dos canciones un fin de semana podía ganar mucho dinero.
Es dueño de una filosofía de la vida según la cual cada día está mejor; nunca dice "estoy bien", sino "estoy mejor". Para él uno siempre está mejor el día de hoy que el día de ayer. Cada día pretende ser un artista mejor, un ser humano mejor, un padre mejor, un amigo mejor, un trabajador mejor. Actualmente mantiene su programa de televisión "Gózalo", acaba de sacar al aire como productor el programa "VIP" y se presenta cada lunes a las 10:00 de la noche en el Bar del Teatro Nacional con el show "Todo en uno", dirigido por Milton Peláez, que fuera quien lo llevara a "Sabroshow", su debut en la escena de la Capital.