Cómo evitar las malas digestiones
Mira qué hábitos incorporar para mejorar tus digestiones

Una mala digestión es un término genérico que se refiere a una variedad de síntomas relacionados con el proceso de digestión de los alimentos. Los síntomas pueden incluir:
Dolor abdominal: Puede haber dolor o molestia en el estómago o en el área del abdomen después de comer.
Hinchazón: El estómago puede sentirse hinchado y lleno después de comer.
Náuseas: Puedes sentir náuseas después de comer, especialmente si has comido en exceso.
Vómitos: Puedes vomitar después de comer, especialmente si has comido en exceso.
Diarrea o estreñimiento: Puedes tener problemas con las heces después de comer, incluyendo diarrea o estreñimiento.
Reflujo ácido: Puedes sentir una sensación de ardor o quemazón en la garganta o el pecho después de comer.
Gas: Puedes tener exceso de gas o flatulencia después de comer.
Descomposición: Puedes sentir un sabor desagradable en la boca después de comer.
En general, las malas digestiones son un problema temporal y no suelen ser graves, pero si los síntomas persisten es recomendable consultar con un médico para descartar algún problema subyacente.
Ahora, sabiendo esto, ¿cómo puedes prevenirlas?
Come lentamente: Trata de masticar bien los alimentos y tomar tu tiempo al comer. Esto ayudará a tu cuerpo a digerir mejor los alimentos.
Evita comer en exceso: Trata de no comer en exceso, ya que esto puede causar malestar estomacal y dificultad para digerir.
Consume alimentos fáciles de digerir: Trata de incluir alimentos fáciles de digerir en tu dieta, como frutas, verduras, cereales integrales y proteínas magras.
Evita los alimentos y bebidas que te causen malestar: Si sabes que algún alimento o bebida te causa malestar estomacal, trata de evitarlos.
No te recuestes inmediatamente después de comer: Trata de esperar unos 30 minutos antes de recostarte después de comer para ayudar a tu cuerpo a digerir los alimentos.
Evita el tabaco y el alcohol: El tabaco y el alcohol pueden irritar el tracto digestivo y aumentar el riesgo de malas digestiones.
Practica técnicas de relajación: El estrés puede afectar la digestión, por lo que es importante tratar de relajarse antes y después de las comidas.