¿Cómo ayudar a tus hijos a adaptarse a un cambio de colegio?
Dejar atrás a sus amigos, compañeros y profes para empezar de cero en un nuevo colegio es un proceso que puede ser más complejo para los pequeños de lo que los adultos imaginan
Mudanza a otro sector, el paso de educación infantil a primaria, aplicación de metodologías de enseñanza que no rinden frutos... Las razones por las que un niño deba cambiar de colegio son diversas.
Pero independientemente de cuál sea el motivo, dejar atrás a sus amigos, compañeros y profes para empezar de cero en un nuevo colegio es un proceso que puede ser más complejo para los pequeños de lo que los adultos imaginan.
Muchas veces hemos escuchado que los niños se adaptan a los cambios mejor que los adultos y no es solo un mito, es la realidad.
"Ellos se adaptan con facilidad porque todavía se están desarrollando y sus neuronas están haciendo nuevas conexiones con rapidez. Son muy flexibles, incluso físicamente, para poder adaptarse a su ambiente", refiere la psicóloga clínica Nicole Troncoso.
El periodo de adaptación en los niños depende de la edad y del tipo de cambio que sea. Y es que, según la terapeuta familiar, no es lo mismo un cambio de colegio que variarle el tipo de jugo que se les da a tomar.
"Por eso debemos considerar no solo la edad, sino también qué representa el cambio para el niño en cuanto a lo emocional y a sus costumbres", cita.
Hay niños que se adaptan con más facilidad, por su temperamento, carácter y experiencias previas. Para algunos, un cambio puede suponer un desarraigo que les desestabiliza, mientras que para otros puede ser una simple novedad.
Por esta razón aclara que no hay un tiempo que aplique para todos, aunque en promedio un niño se adapta por completo a una nueva situación en un lapso de tres a seis meses.
Emociones que pueden surgir
"Todas las emociones que pueda sentir y expresar para su edad se pueden presentar al cambiar de colegio", indica Troncoso. Lo importante es, como padres, aceptarlas, acompañarlos y entenderlos, lo que contribuye a que el proceso sea más fácil.
Entre las emociones negativas que pueden surgir cita el miedo al rechazo, a la agresión, a no entender la clase, etc.; tristeza, porque extraña a su profesora, amigos o algo de su colegio anterior; o enojo, por haberlo ´obligado´ a hacer un cambio que no quería.
¿Se recomienda el acompañamiento de un psicólogo para hacer del proceso de cambio de colegio menos frustrante para el niño? En primer lugar, la profesional enfatiza en que todas las emociones son válidas y tienen un propósito.
Sin embargo, si el niño está muy resistente al cambio, se altera su apetito y ciclo de sueño de forma significativa, empieza a tener más pesadillas de lo usual o los padres notan un cambio muy importante en su conducta o estado emocional que le impida hacer sus actividades cotidianas, se recomienda el acompañamiento de un psicólogo.
Ayudarlos en el proceso
Para ayudar a que tu hijo afronte mejor un cambio de colegio, la experta propone las siguientes recomendaciones:
- Hablar de la posibilidad del cambio de colegio y escuchar sus preocupaciones.
- Considerar sus preocupaciones y ayudar a disminuirlas. (Ej: si le preocupa perder a sus amigos anteriores, hagan un plan para poder mantenerlos en contacto).
- Llevarlo a conocer el colegio nuevo acompañado por adultos con quienes se sienta seguro, como sus padres.
- Ver el colegio nuevo varias veces, por fuera y por dentro, antes de que inicie el año escolar. Esto ayudará a que le sea familiar cuando inicie.
- Despedirse del colegio anterior. (Puede hacer un dibujo, una carta, ir a visitarlo, etc).
- Cuando inicie el año escolar, escuchar sus experiencias siendo comprensivo y compasivo. Luego de escucharlo, puedes brindarle alguna orientación si así lo requiere. Es recomendable ir a buscarlo al colegio personalmente, pues a la salida los niños están más abiertos a contar cómo les fue.
- Conoce el sistema del nuevo colegio y a la profesora. Esto le hará sentir a tu hijo más acompañado y apoyado.
Si luego de un mes permanecen alteraciones emocionales o conductuales importantes, se recomienda acudir a un psicólogo infanto-juvenil o familiar. Troncoso también aconseja ir a consulta si luego de cuatro meses los niños no se han adaptado al nuevo colegio (normas, horario, compañeros, etc).