?Sin excusas
En la actualización de 2020 del Diccionario de la lengua española no todo es pandemia y crisis sanitaria. La gastronomía, cada vez más popular y más global, se adueña de las nuevas entradas del diccionario.
Nos proponen los populares nachos, típicamente mexicanos, ‘trozo triangular de tortilla de maíz’ y aprendemos que la palabra procede del nombre del cocinero mexicano Nacho Anaya. Hay lugar para las delicias orientales, como el sabroso falafel (o faláfel) ‘bolas fritas de pasta de garbanzos u otras legumbres’ o el suculento tayín, un guiso norteafricano muy especiado que se cocina en particular cazuela con tapa a la que también llamamos tayín. También el sustantivo wok comparte la designación del utensilio de cocina (‘sartén ancha y profunda con asas utilizada en la cocina oriental para saltear’) con la del plato que en él se prepara. Descubrimos que el italianismo carpacho (‘plato de lonchas muy finas de carne o pescado aliñadas que se come crudo’) procede del apellido del pintor veneciano Vittore Carpaccio, porque la creación del plato estuvo inspirada en una exposición que se le dedicó a este pintor en su ciudad natal a mediados del XX.
Si consultan la nueva versión del Diccionario de la lengua española descubrirán que habla de nosotros. Consulten la nueva acepción de chenchén, ‘plato propio de la República Dominicana, elaborado con harina de maíz, aceite, sal y coco’. El chenchén y la discusión están servidos. Aparecerán tantas recetas de chenchén como cocineros.
Después de este banquete no nos vendrá mal practicar algo de zumba. El sustantivo zumba, masculino o femenino, también ha sido incluido en el diccionario para referirse a la práctica deportiva que combina el baile con ritmos latinos y los ejercicios aeróbicos. Se acabaron las excusas, sobre todo con la que se nos viene encima en estas fechas.