Para bien o para mal, los partidos políticos se enseñorearon de los gremios profesionales
Muchos creen que los partidos han debilitado y desacreditado los gremios ante la sociedad
Los partidos políticos se han metido en los más grandes y poderosos gremios de profesionales del país desde hace décadas y la lucha por controlarlos ha provocado que las elecciones de sus autoridades sean procesos convulsos, traumáticos y violentos, llegando a costar vidas.
Más allá de los intereses de sus asociados, detrás de los candidatos ondean las banderas de los partidos del sistema, principalmente el Revolucionario Moderno (PRM), el de la Liberación Dominicana (PLD) y Fuerza del Pueblo (FP).
Este fenómeno es visto por algunos gremialistas como una prostitución del sindicalismo, que lo ha desacreditado ante la sociedad y lo ha hecho perder su relevancia social. Otros lo consideran natural y entienden que el problema está en la calidad de los líderes.
En principio, el Código Laboral indica que "los sindicatos deben conservar su independencia frente a los partidos políticos y a las entidades religiosas" y que "no pueden recibir subsidios o ayuda de los mismos".
El efecto de este matrimonio entre partidos y sindicatos después de tantos años ha sido el debilitamiento de los gremios, a juicio de Wilson Roa, expresidente del Colegio Médico Dominicano (CMD).
"Eso ha debilitado mucho a los gremios, porque en la medida en que los partidos se van a pique, como están ahora mismo, así mismo se demeritan los gremios. Los gremios de hoy no son los que teníamos hace 20 o 30 años. No es la misma incidencia, la credibilidad", analiza el galeno.
Asegura que por eso los gremialistas están desenfocados y han tenido que depender de las dádivas de los gobiernos. "Al final, detrás de los gremios se meten los partidos y son posiciones mediocres las que levantan. Los partidos no pueden con ellos, imagínate ahora si van a poder con otros", indica.
No juegan su rol
El agrimensor Miguel Valoy, miembro y excandidato a la presidencia del Colegio Dominicano de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores (CODIA), entiende que los partidos cambiaron la dinámica de las elecciones para convertirlas en una lucha de recursos e hicieron que organizaciones como la suya dejaran de jugar su rol.
"Por ejemplo, el Metro en Santo Domingo Oeste dio una clara señal de un vicio de construcción que podría costar decenas de vidas en los próximos años y el CODIA no ha intervenido. ¿Por qué? Porque es del Gobierno", acusa.
Afirma que, después de que la política entró al CODIA, "se han aprobado normas que afectan el registro de la propiedad y normas que afectan el ejercicio de los agrimensores, porque el político partidista atiende a sus necesidades particulares, acata líneas y calla cuando se lo ordenan".
No confía en independientes
Muy por el contrario, el presidente de la Federación de Asociaciones de Profesores de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (Faprouasd), Efraín Javier, prefiere a quienes están identificados con un partido político y dice no creer en independientes.
"Yo no creo en independientes, porque los sindicalistas independientes, como no tienen a nadie, se venden más fácil, se prestan a los patrones. Es más fácil que pertenezca a un partido, porque el partido tiene que responder si no hace su trabajo", reflexiona.
El profesor de la carrera de Comunicación Social y miembro del Partido Comunista del Trabajo (PCT) asevera que la efectividad de la lucha sindical depende de la calidad de los dirigentes y que, en su caso, no recibe líneas de ningún partido.
"Hay gente sin consciencia de clase que el partido les dice que se metan a sindicalista y entonces hacen lo que les diga el partido", dice.
Indiferencia
El abogado y miembro del Colegio de Abogados de la República Dominicana (CARD), Luis Yépez Suncar, atribuye la penetración de la política a que "la mayoría de las personas que forman parte de los gremios no se interesan por participar de manera activa, incluyendo a los profesionales destacados y prestigiosos".
Está de acuerdo en que lo ideal es que los gremios se rijan única y exclusivamente por sus integrantes, pero observa que los partidos se empeñan en ganar la presidencia para exhibir fortaleza.
Sindicatos peligrosos
Agustín Severino, abogado laborista y usual representante en los tribunales de trabajo de empleados sindicalizados, está convencido de que los partidos tienen el claro propósito de destruir los sindicatos, motivados también por una oligarquía que los ve como un peligro.
El resultado, a su juicio, es que las organizaciones políticas han contagiado a las asociaciones de empleados con su corrupción.
Recuerda que los sindicatos son por definición asociaciones de trabajadores, pero también de empleadores, según el artículo 317 del Código Laboral. Por esto, los empresarios también se organizan en gremios.
"Los asociados que están arriba (de empresarios) son los que han metido corrupción y han comprado a los sindicalistas y a los partidos políticos para meterle candela a los obreros", acusa el abogado.
Desde otra perspectiva, Javier A. Suárez A., abogado laboralista, considera que toda esta situación es parte del juego democrático, aunque reconoce que el partidismo "ha condicionado y ha redirigido las luchas internas (de los gremios)".
"A veces se siente como que es un partido contra otro y no profesionales liberales contra otros, como debería de ser", opina.
Casos
Recientemente fue reelecto como presidente de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) el maestro Eduardo Hidalgo, quien al mismo tiempo fue diputado del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) desde el 2010 hasta el 2024.
El conflicto por los resultados de las elecciones para elegir al presidente del CARD en diciembre pasado llegó hasta el Tribunal Constitucional.
En el año 2017, un hombre fue asesinado y seis heridos en un tiroteo en medio de los comicios para elegir a la directiva de la Federación Dominicana de Estudiantes (FED) en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).