COP29 aprueba reglas para los mercados de carbono
Expertos aseguran que el mecanismo podría contribuir al financiamiento climático de República Dominicana
La conferencia anual sobre el cambio climático (COP29) inició con la aprobación de las reglas para el mercado internacional de carbono, tras una larga y tensa sesión negociadora para aprobar la agenda de la cumbre.
La constitución de los mercados internacionales de carbono debería facilitar a las naciones cumplir sus metas climáticas mediante la comercialización de créditos de emisiones de gases de efecto invernadero.
Las disposiciones, en espera de aprobación desde el Acuerdo de París sobre el clima de 2015, fueron adoptadas por consenso por los cerca de 200 países que participan en la COP29 en Bakú, la capital de Azerbaiyán.
Un crédito equivale a una tonelada de dióxido de carbono que se evita que entre en la atmósfera o se elimina de ella.
Los criterios adoptados regulan la metodología para calcular el número de créditos que puede generar un proyecto determinado, así como lo que ocurre si el carbono almacenado se pierde, por ejemplo, si se incendia el bosque que les servía de respaldo.
Las nuevas normas conciernen sobre todo a los países --especialmente los contaminadores ricos-- que buscan compensar sus emisiones comprando créditos a naciones que han reducido los gases de efecto invernadero más allá de lo que habían prometido.
Los criterios adoptados regulan la metodología para calcular el número de créditos que puede generar un proyecto determinado, así como lo que ocurre si el carbono almacenado se pierde, por ejemplo si se incendia el bosque que les servía de respaldo.
Impacto local
Consultado sobre el impacto que tendrá para República Dominicana la aprobación de las reglas sobre los mercados de carbono, Alan Ramírez, representante Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y facilitador país del NDC Partnership, recordó que los compromisos climáticos del país "implican una inversión financiera significativa. Los mercados de carbono pueden y deben contribuir al financiamiento climático".
Añadió que el libro de reglas aprobado "permitirá o facilitará el desarrollo de los mercados de carbono, a través de un nuevo mecanismo, llamado Mercados de Desarrollo Sostenibles".
Meses de negociaciones
La COP29 debe demostrar que la cooperación mundial "no está en punto muerto", pidió el jefe del organismo de la ONU para el Clima, Simon Stiell.
La cumbre de Bakú ha sido denominada informalmente la "COP de la financiación", porque debe lidiar con el tema esencial de las ayudas que los países que más contribuyen al problema le deben aportar a las naciones más perjudicadas.
Durante meses los casi 200 países del Acuerdo de París han negociado un borrador de acuerdo para fijar una nueva cantidad de ayuda.
En 2009, en la COP15 de Copenhague, se acordó que los países industrializados entregarían 100,000 millones de dólares anuales, en ayuda directa o préstamos multilaterales.
Ese volumen de ayuda se alcanzó con dos años de retraso, en 2022, y ahora los expertos afirman que se necesita como mínimo una cantidad diez veces superior.
Esa ayuda debe servir tanto para mitigar la emisión de gases de efecto invernadero, particularmente mediante una gigantesca reconversión energética mundial, como en la adaptación, es decir, la construcción de diques, la adaptación de los hogares a las temperaturas extremas.