Impacto del cambio climático en la reproducción de los arrecifes de República Dominicana
Científicos reportan una drástica disminución en la cantidad de colonias y su baja productividad de óvulos y esperma en varios puntos del país y la región
Desde el pasado sábado 1 de junio al miércoles 5, el equipo técnico de la Fundación Dominicana de Estudios Marinos (Fundemar) salió al mar en tres puntos de Bayahíbe para la recolección de gametos del coral Diploria labyrinthiformis (DLAB), comúnmente llamado coral cerebro.
Desde 2019, Fundemar colecta los gametos de esta especie para la reproducción asistida en su laboratorio. En 2023 tuvieron una colecta récord con esta especie, la cual desova entre 9 y 14 días después de la luna llena de abril y/o mayo.
De acuerdo al calendario de predicción de desove, este se produciría masivamente entre el domingo 2 y el lunes 3 de junio.
Todo el equipo de Fundemar y voluntarios se concentraron en el primer gran desove de este año, el cual continúa con otras especies hasta el mes de septiembre. Esto sucede anualmente en toda la región del Caribe, en una sincronía que garantiza la reproducción de estas especies y que sigue siendo uno de los fenómenos naturales más sorprendentes del planeta.
Diario Libre acompañó el lunes tres de junio a Fundemar, para documentar el desove masivo que posiblemente sucedería entre las 5:30 y 6:30 de la tarde.
Desde el descenso de los buzos, en tres puntos diferentes de Bayahíbe, poco después de las 5 de la tarde hasta casi las 7 de la noche, solo se reportó el desove de unas pocas colonias y en una cantidad de gametos mucho menor desde los inicios de monitoreo en 2019.
La cámara de Diario Libre perseguía a la directora ejecutiva de Fundemar, Rita Sellares, a unos cinco metros de profundidad, revisando cada una de las colonias de DLAB. Detrás de la máscara de buceo sus ojos denotaban la impaciencia porque el desove ocurriera.
Cada vez que nos acercábamos a una red sobre una colonia, Sellares revisaba el frasco de colecta y hacía una señal negativa con su dedo índice.
De 24 redes colocadas en el punto seleccionado, solo una colonia desovó unos pocos gametos. Ya cerca de las 7 de la noche se recogían las redes, esperando mejor suerte para el siguiente día.
Dos días más y el desove masivo que esperaban, no sucedió. Lo mismo se reportó en otros puntos de la isla y en países de la región, salvo Cuba.
En 2023 solo en Bayahíbe, Fundemar logró 15 millones de embriones de la especie DLAB, de los cuales 5,420,625 se cultivaron en los espacios del laboratorio y CRIBS (estructuras flotantes en el mar diseñadas por Secore International), y el resto fue liberado al arrecife. Este año solo fueron cerca de 791,550, todos ellos conservados entre el laboratorio y los CRIBS.
La lucha de Fundemar por los arrecifes en RD
En los últimos cuatro años, los arrecifes coralinos en República Dominicana han enfrentado una devastación sin precedentes. Rita Sellares, directora ejecutiva de Fundemar, ha observado de cerca cómo las altas temperaturas, resultado del cambio climático, han afectado los arrecifes y, sumado a esto, la aparición de enfermedades como la pérdida de tejido de coral (SCTLD).
Según los datos recientes, entre el 40 y el 60 % de los corales en el país han desaparecido en este breve periodo. Un ejemplo alarmante se encuentra en isla Catalina, donde la cobertura de coral ha disminuido drásticamente.
Para combatir esta situación, Fundemar ha implementado la reproducción asistida de corales. Los corales reclutas producidos mediante esta técnica han demostrado ser entre 2 y 5 veces más resistentes al blanqueamiento y la muerte en comparación con los fragmentos asexuales y las colonias adultas. Este método ha sido crucial para intentar revertir la pérdida de especies coralinas, garantizando su repoblación y asegurando que estos corales puedan eventualmente donar gametos sexuales para futuras generaciones.
"Como mensaje de esperanza hemos podido ver que los reclutas de coral producidos son entre 2 y 6 veces más resilientes que las colonias silvestres y los fragmentos producidos por clonación (reproducción asexual). Por lo que cada esfuerzo vale la pena, y hoy debemos reforzar más que nunca las actividades implementadas garantizando la continuidad de nuestros arrecifes coralinos", dijo Sellares.
Menos colonias y más separadas entre ellas
El trabajo de Fundemar no ha sido fácil. Desde 2019, los esfuerzos para recolectar colonias de coral han aumentado en un 600 %. En ese año, se encontraban 100 colonias de DLAB en un área de 2,000 metros cuadrados. Sin embargo, en 2023, debido a los efectos continuos del blanqueamiento por altas temperaturas en el agua y las enfermedades, la zona de colecta tuvo que expandirse a 6,000 metros cuadrados para encontrar apenas 80 colonias.
En 2024, esta misma cantidad de colonias se encontró solo después de aumentar el área de búsqueda a 12,000 metros cuadrados y de multiplicar los sitios de colecta de uno a tres.
En el punto de colecta se podían observar los restos de colonias muertas y otras enfermas. La constante separación entre colonias sanas o recuperándose representa un reto para su supervivencia, ya que los óvulos y espermas de cada colonia puede que no se encuentren en la columna de agua para la fertilización. Este fenómeno hace que la reproducción asistida en laboratorio sea una gran oportunidad para recolonizar los arrecifes y garantice la biodiversidad tal y como ha sido por millones de años.
Las condiciones climáticas cambiantes han añadido complejidad al proceso de colecta. No obstante, gracias a la colaboración con centros de buceo como Slow Dive Casa Chihuahua y el Tour Caribe, quienes participaron con sus embarcaciones, tanques y personal, Fundemar ha logrado abarcar tres sitios y ampliar su área de colecta. Estas sinergias han sido esenciales para motivar a más centros de buceo a participar activamente en las noches de desove y colecta. También se agradece la colaboración de Scubaquatic con embarcación, y Scuba Caribe y Scuba Fun por su aporte con tanques de buceo.
Además, este año, a través de la Comisión Nacional de Desove, Fundemar ha ampliado su capacidad a nivel nacional, extendiendo la colecta a otras zonas del país. Esto ha sido posible gracias a alianzas con Buceo Ecológico, CEBSE, Fundación Punta Cana y Cap Cana.
A pesar de estos esfuerzos, el desove ha sido significativamente menor en comparación con años anteriores, logrando solo un 5% de producción con respecto al año pasado. Los efectos del cambio climático son una realidad palpable, y Sellares subraya la necesidad urgente de que el estado refuerce las medidas para reducir el estrés local sobre los arrecifes y a nivel global se reduzcan las emisiones de carbono, preservando así estos ecosistemas vitales para el futuro.
El calentamiento global como posible responsable
Aldo Croquer, gerente del Programa de Conservación Marina del Caribe Central para The Nature Conservancy, comenta sobre la situación actual de los corales y sus esfuerzos reproductivos. Aunque aún es temprano para llegar a conclusiones definitivas, Croquer señala que la reducción en el esfuerzo reproductivo de los corales podría ser una consecuencia del impacto del blanqueamiento coralino observado entre mayo de 2023 y enero de 2024.
Los corales dependen de sus fotos simbiontes, las zooxantelas, que aportan más del 90 % de la energía que los corales utilizan para crecer, reparar, calcificar y reproducirse. Sin estas zooxantelas durante períodos prolongados, se ha reportado la interrupción y/o cese de los esfuerzos reproductivos de los corales, ya que redirigen su energía hacia la reparación en detrimento de la reproducción. Croquer espera que los corales pronto puedan retomar el camino de la reproducción sexual, crucial para su capacidad de aclimatación en océanos cada vez más calientes.
Entre 2023 y 2024, se preveía la llegada de la anomalía climática conocida como El Niño, un fenómeno cíclico que ocurre en el Pacífico Ecuatorial y altera las interacciones entre las capas más bajas de la atmósfera y los patrones de circulación oceánica. Uno de los resultados de El Niño es el calentamiento del agua y la acumulación de estrés térmico, evidenciado desde el segundo trimestre de 2023, con desviaciones de temperatura aún observables.
A nivel mundial, se han registrado tres eventos de blanqueamiento masivo anteriormente: en 1998, 2005 y 2016-2017, todos relacionados con la llegada de El Niño. El evento de blanqueamiento de 2023 representa el cuarto y sus impactos han sido devastadores, no solo en el Caribe sino también en el Indo-Pacífico.
Croquer subraya que, aunque aún quedan por delante 2-3 meses de eventos reproductivos para diferentes especies, es crucial monitorear y comprender estos fenómenos para mitigar sus efectos y apoyar la recuperación de los corales.
En los últimos cuatro años, Fundemar ha incrementado significativamente la producción y siembra de reclutas de coral, con alrededor de 15,000 sustratos sembrados por año, albergando más de 500,000 reclutas de seis especies distintas anualmente.
Esta labor ha resultado en la mayor producción de reclutas de coral registrada en el Caribe, convirtiendo a Fundemar en un referente para otras instituciones tanto nacionales como internacionales. En 2021, se logró una producción cinco veces mayor de sustratos con reclutas y diez veces más reclutas en comparación con el primer año de implementación.