Un gobierno que escucha

La decisión del presidente Danilo Medina de posponer el impopular aumento del impuesto a la circulación de los vehículos es correcta, no implica sacrificio alguno para el Gobierno y disuelve un motivo de irritación en la población.

La economía nacional ni la de la gente se ha recuperado todavía del impacto de la reforma fiscal aprobada a finales del año pasado, cuando una disposición que no se había ejecutado por razones de entrada en vigencia sorprende a la clase media y trabajadora dominicana en toda su crudeza. El presidente Medina ha comprendido perfectamente la situación de los bolsillos de los ciudadanos y ha leído correctamente el sentimiento de la gente.

Este diario lo había dicho en un reciente editorial titulado "vayan despacio". No había necesidad de atacar los magros bolsillos de los contribuyentes, ni afectar innecesariamente a la economía con un nueva carga que iba a afectar todas las actividades de la vida nacional por medio del aumento en la carga, el turismo, el transporte y la industria en general, que tiene que utilizar flotillas de vehículos.

El presidente Medina continúa demostrando que sabe escuchar y que tiene el sentido práctico que caracteriza a los estadistas, que no pueden ignorar que las economías funcionan mejor cuando el dinero se deja en manos de los consumidores y se dan todas las facilidades a la empresa para que cree empleos y aumente la riqueza nacional.

Sin dudas, el país se sentirá mejor esta mañana de lunes. Tenemos un gobierno que escucha.

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