Pleito perdido

Nuestro país, con relación a la chikungunya, debe sentirse como Brasil con relación a Alemania: completamente derrotado, abatido en todos los frentes, con un equipo, en este caso de salud, totalmente incompetente frente al adversario.

No hay que darle muchas vueltas al asunto, para darnos cuenta que los mosquitos portadores del mal le han dado una "pela de calzón quitado" a las autoridades de Salud Pública, que no han podido o no han tenido los medios para atacar con eficacia la epidemia.

En verdad constituye una epidemia, porque prácticamente no queda familia dominicana que no tenga un caso del virus, con su correspondiente secuela de absentismo laboral y escolar.

Los asomos de combate al mosquito no han pasado de campañas de relaciones públicas. Las fumigaciones han sido esporádicas, o no se han visto, y ha faltado una efectiva y masiva campaña de publicidad para crear conciencia del mal.

Mientras Salud Pública no se concentre en su labor preventiva primaria, sufriremos estas derrotas.

Diario Libre