La acusación
Me equivoqué al decir que las expresiones del fiscal Wilson Camacho sobre la magnitud de este caso eran exageradas.
Me tomé la misión de, por lo menos, hacer un escaneo a la acusación que el Ministerio Público presentó contra el caso Medusa, en el cual el exprocurador general Jean Alain Rodríguez es la pieza principal, como sabemos.
Tras pasar por encima a algunas páginas, detenerme en otras de manera minuciosa, leer ligeramente unas cuantas y examinar varios de los documentos, tengo que decir que me equivoqué al decir que las expresiones del fiscal Wilson Camacho sobre la magnitud de este caso eran exageradas. Camacho tiene razón al sostener que esta es una investigación sin precedentes en la región y tengo que expresar que el trabajo de la Procuraduría General podría sentar cátedra en el combate a la corrupción en el Caribe.
Después de pasar revista a las 12,274 páginas del documento, me parece increíble que una persona haya concebido y ejecutado semejante esquema por sí sola, pues solamente un genio criminal podría tener semejante capacidad de elaboración y cinismo. Y parece que, en el caso de Juan Alain Rodríguez, así fue.
Cuando estos casos se hacen presente, como periodista y ser humano razonable, uno trata de mantener y defender el derecho de los acusados a la presunción de inocencia o tiende a alojar siempre el cuestionamiento de si todo es cierto, por aquello de alimentar la duda razonable. Mientras pasaba página por página de esa acusación, sin embargo, lo que sentía era una terrible mezcla sentimental de impotencia con repulsión.
¿Cómo es posible que el procurador general de un país se preste para convertir un puesto que debe ser el ejemplo de la corrección y la legalidad en un antro de delincuencia de todo tipo? ¿Cómo se atreve a usar esa silla para desfalcar al Estado que debe defender y robarle a los ciudadanos que tiene que proteger?
Yo no soy dominicano, pero aquí vivo y me sufro estas cosas igual, porque pago impuestos y me preocupo de que esta sociedad eche hacia adelante. Por eso espero que todo lo que dice esa acusación sea cierto y se pruebe, porque es lo que se merecen quienes violan la confianza del pueblo.