Cuidado
La pobreza no es virtud, pero la humildad sí lo es
La pobreza no es una virtud, la humildad sí. Aunque estemos en Navidad y sea época de compasión y solidaridad, hay pobrezas que lloran ante la presencia de Dios. Escudarse detrás de una familia numerosa para reclamar favores oficiales no debería llegar lejos. Eso de seis hijos, sea de uno o varios progenitores, es más irresponsabilidad que ejemplo a seguir. Eso de que nacemos con el pan debajo del brazo no pasa de fábula. Al presidente, cuidado con quien cena.