Cabildos y regalía
Es verdad que los ayuntamientos del país no reciben el dinero que necesitan para atender todas las necesidades de sus comunidades.
Es verdad también que muchos ayuntamientos cumplen con sus funciones gracias a la buena gerencia de sus autoridades.
Es cierto que los cabildos, sobre todo en poblaciones pequeñas, son la principal fuente de empleo y que sus salarios, en general, son bastante bajos.
Pero es cierto también que la ley establece los criterios bajo los cuales se deben invertir los fondos de los ayuntamientos.
Por tanto, se puede decir que los ayuntamientos que no cumplen con su obligación de reservar los fondos necesarios para garantizar la regalía pascual a sus empleados, incurren en una falta de mala administración que debiera ser penalizada de alguna manera.
Guardar, durante doce meses, menos del 9 por ciento de la nómina mensual para entregar la regalía pascual no requiere ser un genio de las finanzas o un científico de la NASA. Basta con actuar como lo haría un buen padre de familia, es decir, con responsabilidad.