Hora de la fiscalización
Los esquemas de defraudación en las plataformas de servicios digitales son serios y atentan contra las normas de sana convivencia y libre comercio
Los esquemas de defraudación en las plataformas de servicios digitales, como Uber, Didi y PedidosYa, son serios y atentan contra las normas de sana convivencia y libre comercio.
Los pasados días hemos recibido cientos de denuncias de usuarios molestos, porque les son cargados servicios de manera irregular, sus pedidos nunca llegan y aparecen como entregados, entre muchos otros ejemplos de cómo unos cuantos inescrupulosos están minando la confianza en estos servicios, claves en el mundo moderno.
Es hora que dependencias como Pro Consumidor y el Defensor del Pueblo ataquen este problema, pues de no enfrentarse, la población seguirá pagando por los deseos de unos cuantos de querer hacer más dinero del que deben.
Las plataformas de servicios digitales han llegado para quedarse y cambiaron la forma como consumimos, colaborando en ganar tiempo, facilitar el acceso y sembrando confianza. Todo ese andamiaje ha comenzado a tambalearse por una suerte de mafia que prefiere sacar partido de las debilidades en lugar de colaborar a mejorarlas, para conseguir así que sean cada día más fiables.