El globo que infló Zoé Saldaña
La dominicanidad le es natural
Merecido, como calificativo, suena vacío. El Globo de Oro concedido a la actriz de origen dominicano Zoé Saldaña aparenta desinflado frente a la poderosa e impresionante actuación en Emilia Pérez. La película es imposible de encajonar en género alguno. ¿Musical, drama? Es la historia de un narco trans y la galardonada participa como actriz secundaria en el papel de la abogada Rita Mora Castro, arrastrada a un mundo peligroso, siempre al filo de la navaja.
Es la encargada de arreglar el cambio de sexo del temible Manitas. Y de representar a la nueva Emilia Pérez en un mundo aparentemente nuevo, pero igualmente lleno de riesgos.
El histrionismo de Zoé Saldaña deja boquiabierto al espectador. Su mimetismo trasciende la rutina. Se enfunda en el personaje de manera asombrosa, lo que refuerza su bien ganada fama en el séptimo arte.
Casi mexicana, alguien le pregunta en la peli de dónde es. Responde que nació en la República Dominicana, pero llegó joven a México. En realidad, nació en New Jersey, de progenitores de aquí y Puerto Rico. La dominicanidad le es natural, como muestra en el mensaje de agradecimiento a la felicitación del presidente Abinader.