Los ataques a las pruebas nacionales
¿No queremos evaluaciones?
Las pruebas nacionales se implementan en el país hace más de 30 años en diferentes niveles del sistema educativo dominicano.
Tenemos las de octavo curso (hoy llamado segundo de secundaria) y las del último año de la educación preuniversitaria (antes cuarto de bachillerato, hoy sexto de secundaria).
Para bien o para mal, sirven como un termómetro de qué está pasando en cuál sector.
Pero ahora no se quieren evaluaciones, aunque, para ser honestos, nunca se han querido.
Ni los maestros quieren que se les evalúe, ni tampoco los centros educativos (públicos o privados) quieren que se sepa lo mal que les puede ir.
Se propone, por el contrario, pruebas diagnósticas que den una referencia de lo que está pasando, pero que todo el mundo siga pasando de nivel, tenga o no las capacidades necesarias.
¿Y qué pasará entonces en el mundo real? ¿Cómo enfrentarán los fracasos de la vida?
La República Dominicana necesita más evaluaciones, mayor rigurosidad y más supervisión en el sector educativo.
¿O vamos a seguir invirtiendo miles y miles de millones de pesos sin parámetros definidos?