El dilema de las pensiones
El tema de las pensiones en el sistema dominicano de Seguridad Social es una cuestión del mayor interés para el futuro de nuestro país y de profunda preocupación para los cotizantes.
Hasta ahora, y de acuerdo con los datos que se tienen, el sistema previsional solo ha aprovechado a los grandes capitalistas que administran los fondos y al Gobierno, que ha podido cubrir sus necesidades permanentes de recursos con los fondos de las pensiones.
Por supuesto, el problema no es propio del sistema ni del diseño del caso particular dominicano, sino que confluyen varios factores para afectar el resultado final que no es otro que otorgar una pensión digna a los trabajadores luego de toda una vida dedicada a servir a nuestra sociedad.
Los bajos salarios que limitan el monto de las cotizaciones; la elusión por parte de los empleadores y la altísima tasa de informalidad hacen que los empleados no puedan aspirar a una pensión que cubra sus necesidades, por un lado, y por el otro la tragedia social de que un alto porcentaje de la población quedará sin pensión.
Como nos muestra el tranque en la discusión del salario mínimo, no hay que hacerse muchas esperanzas de que la situación va a cambiar del lado de los salarios y en el caso de la informalidad, solo una política firme del Estado por medio de la cual cada cabeza de familia deba ser cotizante, aunque sea financiado a través de un “bono pensión”, puede resolver ese dilema.
Evidentemente, las Administradoras de Fondos de Pensiones deben estar conscientes de adaptar sus aspiraciones económicas a la realidad del sistema.