Sorprende en Boyá que se acuse a sacerdote de abusar sexualmente de una menor
Hoy se le conoce la solicitud de medida de coerción en Monte Plata
SABANA GRANDE DE BOYÁ. Residentes en el municipio Sabana Grande de Boyá, en Monte Plata, dicen no salir del asombro ante la noticia de que un exvicario de la parroquia La Catalina de esa comunidad esté siendo acusado de agredir sexualmente a una adolescente de 15 años.
Personas de la comunidad, incluso vinculadas a la citada parroquia, dicen que se enteraron del caso por la prensa a raíz del apresamiento del sacerdote José Altagracia González, ocurrido el pasado lunes.
Dicen que el religioso, que se desempeñó como vicario sacerdotal del cura párroco Confesor Reyes Rodríguez, por más de un año y hasta mayo pasado en el lugar, siempre pareció ser una persona íntegra.
Párroco alertó del caso
El cura párroco de La Candelaria, Confesor Rodríguez dijo ayer que fue quien dio la voz de alerta del supuesto abuso cometido por su ayudante a la jerarquía de la iglesia católica, tras haber recibido la información.
“Nosotros tuvimos un encuentro en el cual se me comentó que pudo haber habido algún mal manejo, quizás con un roce o algo parecido con una menor e inmediatamente procedimos a presentarlo al obispo, y en mayo, que fue cuando él conoció el caso procedió a presentarlo a la Procuraduría”, dijo Confesor Rodríguez.
Aclara que quien le dio el dato le relató sobre una conducta inapropiada, pero sin intención de hacer daño, tras afirmar que están colaborando con las autoridades en todo lo que sea necesario para esclarecer el hecho.
Agrega que tras el inicio de la investigación coordinada entre la iglesia y las autoridades judiciales, el sacerdote fue suspendido de manera temporal de todas sus funciones.
Conocen coerción
La Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente de Monte Plata conocerá a las 9:00 de esta mañana la solicitud de medida de coerción contra el José Altagracia Reyes, contra quien el Ministerio Público solicita prisión preventiva.
Según consta en el expediente del caso, al que Diario Libre tuvo acceso, la adolescente dijo en uno de los interrogatorios a que fue sometida que el abuso del sacerdote en su contra consistió en un beso en la citada parroquia en 2016, luego de este haber oficiado una misa en la que participaron varios jovenes que asisten al templo.